Discurso antiAMLO
El discurso del presidente del PRI, Enrique Ochoa, se volvió monotemático. Ya sólo critica al tabasqueño Andrés Manuel López Obrador. Y no es que no haya suficiente tela de dónde cortar con el tres veces candidato a la Presidencia de la República, de que la hay, la hay; sino que ya no voltea a ver a los otros adversarios. ¿Que acaso no hay problemas y otros responsables de lo que sucede en el país? Esa estrategia ya le ha fallado antes al PRI.
La mano de la Iglesia
Redes de PoderEl discurso del presidente del PRI, Enrique Ochoa, se volvió monotemático. Ya sólo critica al tabasqueño Andrés Manuel López Obrador. Y no es que no haya suficiente tela de dónde cortar con el tres veces candidato a la Presidencia de la República, de que la hay, la hay; sino que ya no voltea a ver a los otros adversarios. ¿Que acaso no hay problemas y otros responsables de lo que sucede en el país? Esa estrategia ya le ha fallado antes al PRI.
La mano de la Iglesia
Durante meses la Iglesia católica ha estado metiendo la mano en temas políticos, pero digamos que lo hacía con cierta sutileza, algunas veces desde el semanario Desde la Fe y unas más desde el púlpito. Pues anoche regresaron a su actividad, que ya parece partidista, para exigir a los legisladores que hagan un periodo extraordinario para que se nombre al Fiscal Anticorrupción. Si esto se confirma en los siguientes días, pues los senadores ya intentan la realización de dicho periodo, no dude usted que la medalla se la vaya a querer colgar la Arquidiócesis de México. ¿Habrá algún legislador que les responda “zapatero a tus zapatos”?
Casualidad o fuego amigo
Ya empieza a ser común que atrapen a integrantes del crimen organizado en la Ciudad de México, aún y cuando el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, había negado la presencia de esos personajes en la capital de la República Mexicana. Es por eso que más de uno se pregunta si en realidad es que están cayendo en estos días -ya muy cercanos a que empiecen la definiciones para la sucesión presidencial de 2018- o más bien es parte del fuego amigo de cuando una administración entra en su recta final.