No, no lo puedo creer… Me parece inverosímil que le hayas sugerido cargar con un 16 por ciento de impuesto las rentas y las hipotecas, según consta en la propuesta de Luisito, que ni es reforma fiscal ni miscelánea ni es finalmente nada, salvo una escandalosa agresión al sector productivo, y a la clase media que el año entrante sentirán el frío rigor del acero en sus carnes.
No, Pedro, hermano, no quiero saber que tú propusiste el acuchillamiento de la industria maquiladora de la que dependen millones de empleos y la captación de otros tantos millones de divisas.
¿Tú le insinuaste la posibilidad de homologar el IVA en la frontera cuando en las compras de bienes en Estados Unidos te devuelven el 8 por ciento del “sales tax” antes de regresar a México? ¿Tú también planeabas destruir la economía fronteriza? ¿Tú…? ¿Tú le dijiste que espantara a la inversión extranjera como si dispararas una escopeta en una plaza pública llena de palomas que huyeron despavoridas con la detonación? ¿Ahora cómo volverlas a juntar…?
¿Tú le indicaste al oído a tu ínclito y perínclito pupilo que contrajera el gasto público para deprimir el PIB del 3.5 por ciento esperado a menos del uno por ciento?
No, tú no eras capaz de acabar de un plumazo con el “MexicanMoment”, la gran oportunidad con los caras pálidas, que no habíamos visto en muchos años.
¿Verdad que en los parvularios enseñan que cuando hay recesión como la provocada por tu alumnito, hay pérdida de empleos, cierre de fuentes de riqueza y parálisis económica, misma que no ayuda nadita de nada a la erradicación del hambre ni a alcanzar los niveles de bienestar con los que soñamos?
Pedro, Pedrito: ¿nunca viste nada extraño en su mirada cuando le dabas clases…? ¿A quién se le ocurre echar mano del fondo de los trabajadores del INFONAVIT para financiar el seguro populista del desempleo sin percatarse que lastimaba a dichos trabajadores, al instituto y a la industria de la construcción de la que dependen cientos de miles de mexicanos?
¿Sabes cuántos inspectores corruptos necesitaremos en el país de la tranza para demostrar que una persona carece de empleo y se merece la ayuda del Estado? ¡Uuuuuffff! ¿Tú le diste a entender que le arrebatara a cualquier costo la bandera al orate de López Obrador aunque aplastara el optimismo, ingrediente fundamental para disparar el crecimiento económico? ¿Tú le indicaste que endeudara a México para financiar el gasto corriente y que se negara a gravar las medicinas y los alimentos? No, dime que no…
No importa que muchas de estas propuestas hayan sido rechazadas por el “Congreso” ¿el qué…?, bueno como quieras llamar a esa carpa, el hecho es que Luisito las planteó y las peleó para dividir a la nación, decapitar el entusiasmo y convertir en astillas la imagen de su jefe…
¡A p’alumnito, querido Pericote…! ¿Te imaginas cinco años más así? ¿Es unpejelagarto camuflado…? Si la apuesta era por la reforma energética, ¿no había otra alternativa…? ¡Horror! Haz algo con tu alumnito que parece haber estudiado en las Academias Echeverría…
¿Otro 76, otro, 82, otro 94…? No, no y no…