Ayer muchos transeúntes se preguntaban ¿a poco ya van a abrir el casino?
Porque trabajadores estuvieron arreglando ayer la fachada del centro de apuestas Miravalle Palace.
Este casino fue clausurado por el Municipio de Monterrey el 27 de febrero, junto con otros nueve, por carecer de uso del suelo para casa de apuestas.
Sin embargo, el hecho de que estén ya poniendo anuncios nuevos en el frente significa que ya tienen acceso al edificio, quizás porque lograron una suspensión judicial.
Incluso hay quien dice que entre todos los casineros, a quienes les clausuró la administración de Margarita Arellanes, reunieron una gran cantidad de dinero para buscar corromper a un juez de distrito.
Otra vez sería la misma cantaleta, un juez federal resolviendo por encima de la autoridad municipal, cuando ésta es la que debe mandar en el desarrollo urbano en su territorio.
El mismo argumento que utilizó el exalcalde de San Pedro, Mauricio Fernández, para irse contra el Poder Judicial y su intromisión en el desarrollo urbano municipal.
Veremos qué sucede.
El fiasco de Arnoldo
Arnoldo Ledezma, exsecretario general del PAN, presume ser el principal operador panista que existe en la zona rural.
Pero la semana pasada el señor Ledezma mordió sorpresivamente el polvo en Doctor Arroyo, el municipio de donde es originario y se supone que estaba bajo su control.
O por lo menos eso fue lo que dijo a la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, y a los líderes de la División del Norte.
El domingo en Doctor Arroyo el panista Elvin Torres, funcionario municipal de Monterrey, perdió la elección de candidato a consejero con Itzel Castillo, incondicional del senador Raúl Gracia y antiguo jefe de Ledezma.
El funcionario municipal regio está alegando para justificar su derrota que en la contienda interna se dejó votar a un panista que en la pasada elección participó como candidato del PT a la Alcaldía de ese municipio del sur de Nuevo León.
¿Y cómo sabe Ledezma por quién votó el panista traidor?
Quizá de lo que se trate esta derrota es de una venganza perpetrada por Ledezma, por haberle pedido que bajara su candidatura a consejero por el municipio de Los Herreras.
Reaparece un indeseable
El polémico Fernando Santillán, el exjefe de la Oficina Ejecutiva del exalcalde de San Pedro, Fernando Margáin, está de vuelta.
Santillán hace cinco años estuvo involucrado en un escándalo de corrupción que le costó su puesto en la administración municipal sampetrina.
El panista nicolaíta fue pillado en un audio cuando le reclamaba a un proveedor del municipio de San Nicolás una cantidad de dinero pendiente que nunca pudo explicar el exfuncionario.
Margáin tuvo que despedirlo de su administración y el PAN inició un proceso de expulsión, que como pasa siempre, fue olvidado.
Bueno, el panista registró su candidatura en el PAN de San Pedro para contender por un lugar en el Consejo Estatal, pero luego recapacitó y declinó sus aspiraciones cuando alguien le recordó su expediente negro.
