Redes de poder: La misma fórmula de MC en Quintana Roo
Si finalmente se confirma la postulación del senador José Luis Pech como su abanderado para la gubernatura en Quintana Roo, Movimiento Ciudadano estaría confirmando que prefiere buscar entre los aspirantes fallidos de otros partidos políticos a elegir candidatos en sus propias filas, una fórmula que en el actual proceso electoral ya utilizó en los estados […]
sergio.gonzalezSi finalmente se confirma la postulación del senador José Luis Pech como su abanderado para la gubernatura en Quintana Roo, Movimiento Ciudadano estaría confirmando que prefiere buscar entre los aspirantes fallidos de otros partidos políticos a elegir candidatos en sus propias filas, una fórmula que en el actual proceso electoral ya utilizó en los estados de Durango, con la expanista Patricia Flores, y en Hidalgo, con Francisco Xavier Berganza, quien perdió en la interna de Morena. Nos comentan que, aunque con la decisión de no dar la candidatura de Quintana Roo a Roberto Palazuelos, la cúpula emecista atendió una creciente inconformidad, en la base se sigue cuestionando la apertura a externos, en vez de dar oportunidad a los militantes.
Partido y bolsa de trabajo
Nos comentan que la dirigencia nacional del PRD, encabezada por Jesús Zambrano, estaría “acomodando” a integrantes de la corriente Nueva Izquierda, quienes ya no caben en la nómina del partido en la alcaldía Tlalpan, gobernada por Alfa González, cercana al dirigente del Sol Azteca. Es cierto que las bajas votaciones de los últimos años le han pegado presupuestalmente al partido, por lo que han tenido que apretarse el cinturón, pero de ahí a querer buscar en dónde acomodar, solo por acomodar. Ni hablar.
Deuda verde
No es secreto que el anteproyecto de la Ley Federal para la Regulación del Cannabis que circularon los morenistas el martes pasado ocasionó ruido, descontento y enojo entre los partidos de oposición, especialistas, activistas y la sociedad, ya que se aumentan las penas y se mantienen las polémicas licencias de consumo. En los pasillos del Legislativo federal se habla de que más que una ley restrictiva lo que circuló en días pasados fue la punta del iceberg de una estrategia de Morena, ya sea para volverla a mandar a la “congeladora” o para tener armas con qué negociar con la oposición en los puntos críticos del proyecto.