La salida de Gerardo Treviño Delgado de la Dirección de Recursos Humanos a menos de un mes de que concluya la administración de Jaime Rodríguez Calderón ha preocupado a muchos trabajadores, que están en modalidad de plaza.
Treviño Delgado tenía la intención liquidar con 100 por ciento a los empleados que no entraban en planes del gobernador electo, Samuel García, y con esta salida, que no fue voluntaria, sino renuncia forzada, se tambalea un finiquito con respeto a las leyes laborales.
Nos aseguran que Carlos Garza, secretario de Finanzas y Tesorería, simplemente obligó a que Treviño dejara el cargo, ya que se comprometió con García a que no se gastarían muchos recursos porque el plan es liquidar a medias. Los empleados podrían recurrir a apoyo legal para que tengan su finiquito al 100 por ciento.
Esto significa, como lo adelantó el gobernador, que la administración no tiene un centavo. Carlos Garza ha fallado en gastar de manera eficiente el dinero público, incluso, ya se comienza a pedir más deuda estatal.
Regresa Tapia al Congreso
Claudia Tapia, quien fuera diputada independiente en la pasada legislatura, regresó al Congreso, pero ahora como ciudadana, para promover una iniciativa contra los diputados brinquen de bancada en bancada.
Tapia nos dice que cuando fue legisladora tuvo muchas ofertas de otros partidos para llegar a su Grupo Legislativo y que esto se ha convertido en una práctica muy común en el Congreso.
Esta sería la segunda iniciativa ciudadana que se propone para poner candados a los legisladores, y que cumplan toda su gestión en el partido por el que llegaron.
Un ejemplo muy claro de este problema sucedió recientemente con la diputada plurinominal de Morena, Guadalupe Guidi Kawas, quien brincó a Movimiento Ciudadano, después lo descartó y luego aceptó vestirse de naranja.
Y bueno, Carlos Rodríguez dejó al Partido Verde para irse como independiente y formar su propia bancada, pero aún está la posibilidad de que se integre a MC.