Las imágenes de un grupo de personas empujando a uno de los 30 camiones nuevos de la ruta Bosques ponen en evidencia que los choferes contratados por la Secretaría de Movilidad y Planeación Urbana, a cargo de Hernán Villarreal, no serían aptos para conducir estas unidades.
Si bien es cierto que no fue por una falla mecánica, la realidad es que el operador intentó brincar un camellón, pero estos camiones son muy bajos, lo que no fue tomado en cuenta por él y ocasionó que se quedara atorado. Nos aseguran que los choferes no están preparados para conducir estas unidades de última generación y que muchos de ellos eran taxistas antes de sumarse a la ruta.
Pero, lo más grave, y que pudiera ocasionar pérdidas, es que para cargar los tanques de los camiones con gas comprimido tienen que salir de la Zona Metropolitana a una estación de este tipo de combustible.
Además, acuden a cargar el gas en pleno día, y el calor provoca una reacción en el combustible que ocasiona que no se llene el tanque como debe ser, pues lo tendrían que hacer de madrugada, o en horarios donde las temperaturas no fueran tan altas.
Suben hospitalizaciones por COVID-19
La quinta ola de la pandemia por COVID-19 tendría que generar preocupación en la Secretaría de Salud estatal, a cargo de Alma Rosa Marroquín. Hasta el lunes 4 de julio se reportaron 86 pacientes internados y al corte de ayer había ya 170.
También se están presentando largas filas en los módulos de drive thru de ciudadanos que acuden para hacerse la prueba, algo que llama mucho la atención.
Nos dicen que varias personas han acudido a tomarse la prueba con síntomas de dolor de garganta, fiebre y tos.
Si bien las hospitalizaciones no han llegado a una ocupación al nivel de otras olas, no hay que perder de vista los contagios, porque entonces sí, se vendría otro problema más para Nuevo León.
Veremos qué medidas se están tomando ante este aumento en los casos.