Jessica Elodia Martínez, la única diputada local de acción afirmativa de la diversidad sexual que había sido electa para la próxima legislatura, fue derrocada. La sentencia definitiva de la Sala Regional del Tribunal Electoral Poder Judicial de la Federación puso en evidencia el conservadurismo, el cual no permite que la comunidad LGBTTTIQ+ tenga representación en el Congreso local.
Al revocarle la curul a la diputada electa de Morena, la primera abiertamente perteneciente a la diversidad sexual, el panista Fernando Adame llegará al órgano legislativo, mientras su hermana, María Amparo, será su suplente.
También se coló Iraís Rayes, la exasesora de Luis Donaldo Colosio. Pero tampoco representa a la comunidad LGBTTTIQ+.
Se espera una protesta sobre este tema por parte de activistas que integran Movimiento por la Igualdad en Nuevo León. Asimismo, la dirigencia de Morena, a través de su presidenta, Viridiana Lorelei Hernández, anunció que impugnará la resolución de la Sala Regional.
SUSPE, una carga para Nuevo León
El Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado, cuyo líder es Juan Manuel Cavazos Uribe, exige más plazas, a pesar de la crisis económica que padece Nuevo León por la pandemia de COVID-19.
Lo más lamentable es que el líder presiona en esta época de transición del gobierno de Jaime Rodríguez Calderón con el entrante de Samuel García. Después de casi seis años convocó a una protesta “escalonada” para exigir más plazas.
Muchos burócratas son un verdadero gasto y tienen un presupuesto millonario en salarios que los neoleoneses pagan con sus impuestos. En este sindicato abunda la deficiencia laboral, sin duda.
Cavazos acusa que en el actual gobierno se “hacen locos” para no darle más plazas. Pero ¿y cuando sus sindicalizados se hacen locos para trabajar?
