El gobernador de Nuevo León, Samuel García, intentó levantar el barco de su administración con la medida de retirar la obligatoriedad del uso de cubrebocas en espacios abiertos aunque, de por sí, muchos municipios no aplican esta medida. Esto entrará en vigor el próximo domingo, pero el anuncio se dio de forma anticipada.
La urgencia de anunciar algo era notoria, pues este mensaje viene después de tener una semana llena de reclamos ciudadanos y una baja en la confianza en su administración. No son buenos tiempos para el gobierno de Samuel.
Nadie podrá refutar que las mantas colocadas en la avenida Gonzalitos son un reflejo de inconformidad ciudadana. Le reclaman que la falta de agua no es por sequía, sino que se trata de un saqueo a las presas.
Y ni qué decir de las pintas contra el gobernador y su esposa Mariana Rodríguez durante la marcha del martes 8 de marzo, y las cada vez más severas críticas por el incremento del costo del servicio de agua.
El anuncio de ayer parece mucho una medida populista, sin duda, y sin algún argumento científico que garantice que ya no hay riesgo de contagio.
La duda razonable del fiscal
La Fiscalía General de Justicia de Nuevo León, a cargo de Gustavo Adolfo Guerrero, sigue levantando muchas dudas sobre su supuesta eficiencia para detener a dos hombres por las pintas en el Palacio de Gobierno durante la marcha del martes 8 de marzo.
Gustavo Adolfo salió rápidamente a informar los avances de la investigación, algo que no hizo, por ejemplo, con la muerte de Ángel en el albergue del DIF Fabriles, para lo cual tardó días en iniciar una investigación, un caso que sigue lleno de dudas e irregularidades.
Incluso, existen entrevistas de empleados que aseguran que el menor habría sido golpeado. La duda es razonable en el caso de Ángel, y ni siquiera se informó si los directivos del DIF ya fueron llamados a cuenta. Parece que los métodos fueron diferentes en el caso de los dos hombres detenidos. Así es la justicia en Nuevo León.
Y a pesar de que hay videos de las personas que realizaron pintas y quemaron la puerta principal de Palacio de Gobierno, llama mucho la atención que no se hayan registrado más detenciones.