La posibilidad de un rebrote de COVID-19 en Nuevo León y su impacto al sistema de Salud en la entidad no está para bromas, al menos eso es lo que quiere transmitir el gobierno que encabeza Jaime Rodríguez Calderón con las sanciones que pretende imponer.
Según lo informado por el secretario de Salud, Manuel de la O, la dependencia a su cargo se tomará de manera más estricta la observancia para el cumplimiento de los protocolos sanitarios, sobre todo por parte de los establecimientos comerciales, y señaló que, además de la clausura o suspensión de actividades, podrían aplicar multas de hasta un millón de pesos, dependiendo de las irregularidades y de cada situación particular, e incluso dijo que podrían utilizar a la corporación Fuerza Civil para asegurar el cumplimiento de las medidas sanitarias.
Es difícil saber si este anuncio de sanción millonaria tenga únicamente un fin disuasorio o realmente el gobierno neoleonés piensa que puede recaudar algo a través de estas multas. Hay que recordar que la administración de Rodríguez Calderón ya ha sido cuestionada por supuestamente valerse de la pandemia para recaudar dinero, sobre todo por sus políticas sancionatorias en transporte público o las multas propuestas para portadores del virus que no tomen medidas de aislamiento. Uno nunca sabe.
Va Tapia por austeridad
La presidenta de la Comisión de Presupuesto en el Congreso de Nuevo León, la diputada Claudia Tapia Castelo, mostró una postura de austeridad, lo que abre la puerta para que no se concrete el aumento al presupuesto que pretendía obtener la Comisión Estatal Electoral y que fue adelantado por este medio.
Tapia Castelo fue clara en decir que existen prioridades más importantes, rubros relevantes que merecen mayores recursos y, por ello, su postura será esa: austeridad. Ahora lo que se espera, en el mismo sentido, es que el resto de los coordinadores de las diferentes bancadas tengan esa sensibilidad.
Lo que resultaría inexplicable es que los legisladores avalen un aumento en el presupuesto de este órgano, cuando en el Congreso también estarían recortando los gastos para el próximo año.
La postura de la legisladora se podría replicar en otros entes autónomos y se espera que hasta los propios partidos políticos tengan también que apretarse el cinturón.
Lo cierto es que, hasta el momento, ni siquiera se han pronunciado sobre la necesidad de mantener la austeridad para el próximo año electoral, a pesar de que por la situación de la pandemia tendrían menos gastos.
El secretario de Salud, Manuel de la O, adelantó que en dos semanas dará a conocer las restricciones para las precampañas y campañas, ya veremos qué tan estricto será.
