Tras la manifiesta decepción del diputado Luis Donaldo Colosio con la dirigencia de Movimiento Ciudadano, tanto por su política de alianzas en Nuevo León como por la ausencia de imparcialidad en sus procesos internos, los panistas se han acercado con el legislador, sin embargo, no han sido los únicos.
Colosio Riojas también ha tenido pláticas con Morena, partido que estaría tanteando el terreno para ofrecerle la candidatura a la alcaldía de Monterrey; estos acercamientos se habrían acelerado durante el fin de semana pasado, aunque lo cierto es que, al menos públicamente, el diputado emecista no parece haber tomado una decisión.
Aunque la oferta del PAN es convertirlo en candidato a la gubernatura, Colosio teme que los caciques de este partido, como Zeferino Salgado o Raúl Gracia, lo utilicen para mantener y aumentar sus posiciones en las alcaldías y diputaciones, y que terminen dándole la espalda como lo hicieron con Felipe Cantú en la elección de Monterrey en 2018.
El tema ideológico y el recibimiento por parte de algunos cuadros de Morena es el gran inconveniente.
Aunque no se registró para buscar la candidatura de Monterrey y tampoco se ha dejado ver en los eventos partidistas en los últimos días, Colosio aún tiene abierta la posibilidad de ser candidato emecista a la alcaldía regia, por lo que toda esta especulación bien podría ser una estrategia política de su parte. No vaya ser que al final se quede fuera de toda posibilidad; la decisión que sea que vaya a tomar ya no puede postergarse tanto.
La soledad de Samuel
El senador con licencia de Movimiento Ciudadano, Samuel García, pierde el tiempo para promocionar su imagen en una precampaña, que simplemente no tiene sentido, pues está compitiendo solo, sin un adversario.
Por supuesto que ganará por default la candidatura y sin poder medir fuerzas, es decir, simplemente está engañado con esta contienda, que lo único que hace es generar muchas dudas de que aprovecha este momento para hacer, desde ya, una campaña electoral.
Eso sí, la información que manda es, ahora sí, muy cuidadosa y parece que incluso desde sus boletines y en el manejo de sus redes sociales hay filtros
Samuel parte muy atrás en la intención del voto y aunque la primera percepción es que al ser aspirante único saldría fortalecido, lo cierto es que la falta de un “sparring” y los cuestionamientos por la ausencia de un verdadero proceso interno le podrían terminar jugando en contra. El senador está solo, para bien y para mal.