Diputadas y diputados del Congreso local alistan llamar a comparecer al secretario de Medio Ambiente estatal, Alfonso Martínez, para que responda sobre las acciones por la contaminación en la Zona Metropolitana de Monterrey.
Pero, más allá de esto, lo que tendría que explicar puntualmente es el funcionamiento del sistema de monitoreo ambiental, el cual no emite alertas a tiempo. Asimismo, habría que indagar el motivo de por qué algunas veces no funcionan las estaciones y quién se encarga de su mantenimiento.
La forma de medir las partículas tendría que hacerse pública, pues de lo contrario no se tiene certeza sobre el método. Otro punto que tendría que explicar Martínez está relacionado con los motivos por los cuales el impuesto verde no se aplicará a la empresa Cemex y Vitro, que son las principales contaminantes en la entidad.
Sin duda, los diputados locales tienen, ahora sí, que cuestionar a Alfonso, pero de una manera firme y no salir con preguntas a modo, porque entonces sí sería, como ya ha pasado en otras ocasiones, una simulación legislativa.
Nos dicen que también será llamado a cuentas, esta semana o la siguiente, Juan Ignacio Barragán, director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, pero sólo en una comisión especial. Veremos qué tanto cuestionan los diputados a este funcionario.
Licitación en duda
La divulgación de la fotografía de un camión eléctrico circulando por calles de la Zona Metropolitana de Monterrey, que tenía el logotipo de la empresa TICSA, ha sido un grave error de la Secretaría de Movilidad e Infraestructura, a cargo de Hernán Villarreal.
Nos aseguran que los encargados de la imagen y comunicación de esta dependencia estatal, entre ellos Jorge Ficachi, no tuvieron la precaución de verificar que el camión era de la empresa, más cuando ni siquiera se ha licitado el arrendamiento de estas unidades para el transporte público.
Sin duda, este error sólo generará dudas en el concurso para el arrendamiento de estas unidades, aunque nos comentan, al interior del equipo de la dependencia a cargo de Villarreal también se han encendido las alertas porque no es la primera ocasión que este tipo de descuidos comprometen los trabajos o los procesos en curso. Y, aún, incluso se está poniendo en tela de juicio en dónde está realmente la lealtad de algunos trabajadores, pues ahora lo que se teme es que la información de la Secretaría de Movilidad se esté filtrando a otros actores políticos que tienen una agenda muy distinta a la del Gobierno federal, sobre todo, respecto a la planeación y ejecución de algunas obras como la Línea 5 del Metro.
