Después de una semana de pesadilla para el grupo parlamentario del PRI, y en especial para su coordinador Francisco Cienfuegos, los priistas comienzan a recuperar la sonrisa, al menos de
momento.
Tras las salidas de los diputados Melchor Heredia y Marco AntonioGonzález rumbo a Morena, la bancada tricolor se quedó únicamente con 6 integrantes, los mismos que Movimiento Ciudadano y dos menos que la bancada guinda, lo que en la práctica le quitaba el control del Congreso.
Pero anoche, el grupo parlamentario sumó a dos integrantes más. Se trata de los legisladores Esperanza Alicia Rodríguez López y Zeferino Juárez Mata, quienes abandonan las filas del
PT y se unen a la bancada tricolor, como habíamos adelantado en este espacio.
A través de un boletín, Cienfuegos del PRI, presumió que su bancada está más fuerte que nunca, y que continuarán impulsando las reformas que estén del lado de la gente. Y asegura que la llegada de los hoy exdiputados del PT no interfiere con la agenda y compromisos que en su momento asumieron con su anterior bancada.
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Verificación en duda
El gobernador Jaime Rodríguez Calderón, de forma muy ‘oportuna’, aprovechó el recuento sobre los daños que dejó en Nuevo León el paso de la tormenta tropical ‘Fernand’ -cuyo monto
asciende a un estimado de 7 mil 500 millones de pesos hasta el día de ayer- para anunciar que se destinarán 200 millones de pesos que estaban presupuestados para la implementación de la verificación vehicular para solventar las afectaciones del fenómeno natural en la entidad.
Aunque el mandatario podría hacer este ajuste en la reasignación de los recursos sin tener la aprobación del Congreso local, el ‘Bronco’ aseguró que prefiere contar con el consenso de los
diputados.
Y aunque en estricto sentido esa bolsa de recursos es para combatir las afectaciones por la contaminación ambiental, y la verificación vehicular es solo una de las medidas, es mucho más redituable políticamente decir que se va a destinar una cantidad millonaria para la reconstrucción tras el paso de la tormenta que en un programa que no cuenta con el respaldo
ciudadano.
Sin esos 200 millones la implementación del programa de verificación está en duda. ¿Tendrá contemplado el gobierno de Nuevo León destinar parte de su presupuesto para medidas preventivas? ¿O esperará a invertir en la mitigación de los daños después de cada tormenta,
como cada año?