Las irregularidades en Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey no son nada con lo que podría encontrar el gobernador Samuel García si se mete de lleno a revisar, pues existen muchos más casos que pudieran tener elementos de corrupción.
Dice Samuel que se hicieron pagos por estimaciones de obras, pero, en comparación con los gastos millonarios para introducir un software al Sistema de Aplicaciones y Productos (SAP), que ayer seguía fallando, parecen un tema menor.
La mafia que dice Samuel que hay en la empresa no está en las licitaciones de obras, sino en la dirección de sistemas, de Gerardo García Arteta, y en la dirección de comercio, de Sandra Said y Carlos García Salazar, quienes controlaban todo en Agua y Drenaje.
El gobernador se vio decidido a entrarle de lleno a la corrupción en esta empresa y se espera que inicie una investigación profunda que termine en la Fiscalía Anticorrupción. Veremos si estas declaraciones de Samuel no terminan sólo en mero discurso.
LOS PENDIENTES DE BALLESTEROS
La titular de la recién creada Secretaría de Desarrollo Urbano Sostenible del Municipio de Monterrey, Laura Ballesteros, anunció un incremento de 250 por ciento para la expedición de los permisos de uso de suelo y, además, plantea revisar los expedientes.
Pero lo que no sabe Ballesteros, y eso lo exhibe en sus declaraciones, es que se liberaron las alturas para la construcción de edificios a través del reglamento municipal por normas que se establecieron en las modificaciones de la Ley de Desarrollo Urbano
El compromiso de liberar alturas por parte del municipio fue para que los desarrolladores invirtieran en el primer cuadro como parte de la regeneración del centro, por lo que hoy se tiene un boom inmobiliario de edificios y plazas comerciales.
Es por eso que se ven muchas construcciones de edificios. Pero donde sí podría haber irregularidades es en los permisos de la carretera nacional o por la zona de Cumbres, nos aseguran. Es normal que Ballesteros poco a poco se vaya aclimatando, pero tendría que acoplarse de manera rápida para atender estos pendientes.
