El director del Sistema de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barragán, pretende cuadrar algunos datos estadísticos para interpretar algunos números a modo y así justificar un aumento en la tarifa del servicio.
Nos aseguran que Barragán anda en busca de cualquier pretexto para poner en marcha el incremento. Cuando anunció que iba a perforar más pozos en busca de agua, dijo que le dejaron un desorden financiero.
Humberto Panti Garza, titular de Administración y Finanzas, sería la cabeza para hacer un acomodo en las finanzas y subir la tarifa.
Resulta inexplicable que Barragán esté pensando en aumentar el servicio, cuando ni siquiera puede poner orden en los pozos, además del mal servicio que da y ni qué decir de solucionar el problema de desabasto.
Pareciera que Barragán sólo busca más dinero para cumplir algunos caprichos de sus allegados, pues quiere recursos federales a través de la declaratoria de emergencia por la sequía.
Samuel descuida las formas
La reunión privada entre el gobernador Samuel García y los diputados federales careció de inclusión por parte del titular del Poder Ejecutivo, nos aseguran.
Resulta que a las diputadas Annia Gómez, del PAN, y María de Jesús Aguirre, del PRI, entre otras, les asignaron un lugar en la reunión casi casi fuera del Salón Polivalente del Palacio de Gobierno.
¿A poco porque Annia un día antes criticó al mandatario tuvo un mal trato? Pareciera que sí.
Nos dicen que Ildefonso Guajardo, legislador del PRI, se vio molesto por el trato a las diputadas. Incluso, tomó la palabra y antes de que se conectaran otros legisladores vía virtual, le dijo a Samuel que él tenía que hacer la transmisión, no quien asignó los lugares en la reunión presencial.
Y es que la mesa parecía un “club de Toby”, nos dicen. Sin duda existió molestia.