Redes de poder: Se apuntan ante posible relevo en FGR
La permanencia de Alejandro Gertz Manero como fiscal general de la República (FGR), no es ningún secreto, está en entredicho. Las reciente resolución del órgano autónomo respecto al caso de Salvador Cienfuegos y la filtración de investigaciones sensibles, todo esto en los últimos días, han reavivado la posibilidad de su salida. Nos comentan que inclusive […]
Redes de PoderLa permanencia de Alejandro Gertz Manero como fiscal general de la República (FGR), no es ningún secreto, está en entredicho. Las reciente resolución del órgano autónomo respecto al caso de Salvador Cienfuegos y la filtración de investigaciones sensibles, todo esto en los últimos días, han reavivado la posibilidad de su salida. Nos comentan que inclusive algunos personajes ya se están moviendo y se están proponiendo en algunos círculos de la 4T para tomar el puesto de fiscal. Uno de ellos es Bernardo Bátiz, quien ya estuvo en la terna que envió el presidente en 2019; y el otro sería Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera. Nos recuerdan que Nieto Castillo, quien tenía intención de competir por la gubernatura de Querétaro, finalmente se quedó en la UIF a petición del propio presidente. ¿Lo apoyarán en caso de que haya relevo en la FGR?
Nada ha cambiado
Si bien en Estados Unidos el equipo de trabajo del nuevo presidente, Joe Biden, anunció un cambio de paradigma en el combate a la migración ilegal, que incluye mayor flexibilidad para otorgar asilo, el cese de la construcción del muro fronterizo y una nueva reforma migratoria, lo cierto es que México parece que se continúa trabajando con la misma estrategia de la era Trump. El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano alertó por un fuerte operativo de cientos de elementos de la Guardia Nacional, Fuerzas Armadas y corporaciones policiacas locales en las inmediaciones del río Suchiate para intentar contener la nueva caravana que avanza con destino a Estados Unidos. Además, denunciaron, que la estrategia federal sigue siendo la misma: combatir la migración con fuerza y represión y no con un nuevo enfoque basado en los derechos humanos. Nada ha cambiado.