Romero Deschamps tiene esperanza
Esperanza Bonifaz, leyenda en la Junta Federal de Conciliación, hace un año fue jubilada con anticipación y se fue trabajar al Instituto del Petróleo, coto del sindicato petrolero.
Redes de PoderEsperanza Bonifaz, leyenda en la Junta Federal de Conciliación, hace un año fue jubilada con anticipación y se fue trabajar al Instituto del Petróleo, coto del sindicato petrolero.
Sin embargo, no deja de ser curioso que ahora que se va a dirimir quién es el auténtico líder del sindicato petrolero, Esperanza vuelva a ser contratada por la instancia que, al final del día, tendrá la última palabra.
Nada de Nava
Y ya que andamos por los dominios de Pemex, el expresidente del PAN, César Nava, le está explicando a quien lo quiera escuchar, que está muy lejos del escándalo de los contratos conflictivos de Siemens.
El que fuera director jurídico de la paraestatal recuerda que, en el 2004, fecha en que brotó la disputa, ya no tenía injerencia en la paraestatal.
Lo que es más: el último papel que le tocó firmar al respecto no solo respetaba las garantías originales dadas por los coreanos y por Siemens, sino que le sumaba 40 millones de dólares más.
Graco, el único
Curiosidad, o para el anecdotario, pero el gobernador perredista Graco Ramírez será el anfitrión del primer cónclave del centro del país, precisamente para que en Morelos se instale la primera agenda del mando único policial.
El hecho es significativo, considerando que el morelense debutó enfrentando oscuros intereses que ahora pretenden cobrarle la afrenta, como quedó claro, con el atentado a su procurador de justicia.
Ninguneo al jefe del Ejército
Si la intención de los senadores era la de rendir homenaje al Ejército Constitucionalista por sus primeros 100 años de existencia, se quedaron a medio camino.
Primero, porque no deja de ser un desaire que el homenaje se haga en un patio, y no precisamente en el recinto del Senado.
Y segundo, porque no se le permitirá hacer uso de la voz al Vigésimo Primer Jefe del Ejército Constitucionalista, que se llama Enrique Peña Nieto.
Y todo porque el panista Ernesto Cordero, presidente del Senado y líder de lo que queda de una mermada fracción calderonista, se opuso.
El panista quiso justificar su decisión arguyendo que el protocolo y la tradición parlamentaria del Senado, lo impedía.
A lo mejor ni cuenta se ha dado que es la primera vez que el Ejército Constitucionalista cumple 100 años.
O sea que no hay ningún precedente, ni tradición alguna que soporte el pretexto del actuario Cordero, para impedir que en la ceremonia hiciera uso de la voz el presidente Peña Nieto.