Súper desbandada

En el PAN no hubo una desbandada, como dijo su presidente Gustavo Madero. Lo que hubo fue una súper desbandada.

Y es que el éxodo de un 80 por ciento, entre militantes y adherentes, equivale a casi un millón y medio de panistas. 

La cifra simplemente no tiene precedentes. Ni en la historia, del PAN, ni en la de ningún otro partido político. 

Lo peor de todo es que el presidente Madero todavía no acepta la desastrosa situación en que se encuentra su partido después de la debacle de las elecciones del 2012. 

Por el contrario, Madero “el soñador”, afirma que para el 2018 los panistas regresarán a Los Pinos que porque la cantidad de panistas que había en el año 2000, era más o menos la misma que ahora. 

A lo mejor Madero necesita que alguno de sus asesores le recuerde que en el 2000 ganó Fox gracias al voto de los entonces Amigos de Fox, y también al voto útil de los perredistas. 

¡Ah! Y también, claro está, a los 300 mil votos de los panistas. 

Y mejor ni hablar de lo que pasó en el 2006, con todo y que la militancia panista creció por las “chambitas”.

Si no hubiera sido por la maestra Gordillo, y los gobernadores priistas del Tucom, Felipe Calderón no hubiera llegado a los Pinos. 

El premio a la traición 

Al que no bajaron de “traidor”, “judas”, y “oportunista” en las redes sociales, fue a Mario Di Costancio. 

Y es que es obvio que quien fuera “ex secretario de Hacienda del presidente legítimo” López Obrador, no solo traicionó al tabasqueño, sino que se traicionó a sí mismo, o por lo menos a las convicciones que el expetista decía tener. 

Quienes tuvieron la oportunidad de escuchar alguna vez a Di Costanzo en la tribuna de la Cámara de Diputados entienden muy bien porque al exdiputado lo califican de “judas” y de “traidor”. 

¿Se habrá calculado bien en Los Pinos las consecuencias de nombrarlo como presidente de la Condusef? 

Y es que si para la mayoría Di Costanzo se vendió, quiere  decir que esa misma mayoría piensa que alguien en el gobierno lo compró.

Se sacó la lotería 

A pesar de que muchos creían que a María Esther Scherman no le darían ningún premio como retribución a sus esfuerzos de campaña, finalmente ayer fue recompensada. 

Enrique Peña Nieto premió a la jalisciense no solo con el premio mayor de la Lotería Nacional, sino también con el de Pronósticos Deportivos. 

Aunque la jalisciense no pertenece precisamente al círculo más cercano a Peña Nieto, cuenta con una amplísima trayectoria política. 

Scherman Leaño no ha dejado de tener cargos importantes desde que José López Portillo asumió la presidencia de la República. En aquellos años ya había sido nombrada delegada del PRI en Baja California. 

En el PRD también habrá desbandada 

Aunque los dirigentes perredistas lo nieguen, a partir de mañana empezará la desbandada del PRD para incorporarse a Morena.

Andrés Manuel López Obrador se registrará hoy en el Zócalo. 

Al PRD de los Chuchos le llegó la hora de la verdad.

A ver de cuál cuero salen más correas.