Tiempo de Decio
Miguel Herrera quedó fuera de la Selección por su carácter.
No por esperada, dejó de ser dramática la salida de Miguel Herrera al frente de la Selección Nacional.
Su carácter lo llevó y lo perdió, su carácter lo puso hasta ahí, su carácter lo sacó de ahí.
Miguel Herrera queda fuera de la Selección Nacional en un tema extracancha, en una agresión absolutamente absurda, estúpida, injustificable, en donde él se pierde.
Alfredo Domínguez MuroMiguel Herrera quedó fuera de la Selección por su carácter.
No por esperada, dejó de ser dramática la salida de Miguel Herrera al frente de la Selección Nacional.
Su carácter lo llevó y lo perdió, su carácter lo puso hasta ahí, su carácter lo sacó de ahí.
Miguel Herrera queda fuera de la Selección Nacional en un tema extracancha, en una agresión absolutamente absurda, estúpida, injustificable, en donde él se pierde.
Ayer le comentaba que se pudo haber burlado de Martinoli con la Copa en la mano, con jugadores, pero lo perdió su carácter, su temperamento.
Aquí habría una cuestión, la Federación Mexicana de Futbol está en un cambio, en una transición, la Federación cambia ya este fin de semana a manos de Decio de María, él es ahora a quien le toca la responsabilidad, y Decio va a poner su sello, Decio viene de la política.
Decio va a hacer a un lado cosas que Justino seguramente lució y va a ser su estilo particular de gobernar.
Esto pone a Héctor González Iñárritu también en un gran predicamento, porque Héctor González Iñárritu es a quien se le fue de las manos Miguel Herrera.
Aquí vendría rápidamente la comparación, qué pasaría en América que Ricardo Peláez sí lo controlaba.
Y mire usted que son tan mediáticos el América como la Selección Nacional, pero bueno, cada quien tiene su estilo de matar las pulgas.
Para González Iñárritu además, es un proceso fallido este de la Copa América y la Copa Oro, pero esto va recargado también con Miguel Herrera.
Qué tanto influyó este tema en Decio que probablemente iba a cuestionar mucho a Miguel y lo iba a condicionar, esto ya está en la especulación y en la cabeza de Decio.
Lo que sí es definitivo es que Decio aprovechó el momento para reforzar esta idea del famoso código de ética que a veces se les va a algunos, directivos inclusive.
Tuve la oportunidad de platicar con un presidente de club, con un dueño de equipo al que no lo consultaron, sino le informaron la salida de Miguel Herrera, y esto de que hablé con todos, más bien les comenté, pero no lo preguntó.
Viene el estilo de comentar de Decio, pone la vara muy alta, es decir el código se respeta, vamos a ver si no se tiene que comer sus palabras en otras situaciones.
Miguel Herrera era desechable, le puedo decir que su proyecto ya estaba fallando mucho, los resultados de partidos moleros y de partidos de Copa América fueron espantosos y de Copa Oro también, y no hay paliativo para la Copa América, porque ellos decidieron, Miguel Herrera y González Iñárritu, llevar dos equipos y no uno.
En el tema de Miguel Herrera, me duele muchísimo porque es mi cuate y porque lo conozco, porque he platicado con él muchas veces,porque en alguna entrevista que le realicé hace unos meses, en Chiapas, le preguntaba de su carácter y me decía que lo estaba controlando.
Le puedo decir a usted que algo que le hizo mucho daño a Mguel Herrera es exactamente lo mismo que le pasa a Hugo Sánchez y que le pasó a Carlos Hermosillo en la CONADE.
Yo entiendo y adoro a mi familia, es el don más grande que Dios me ha dado, mi familia, mis hijos, mis nietos, a usted seguramente también, su familia, sus hermanos, en fin, pero andar cargando a los familiares a todos lados es un problemón, es romper, y aquí está el tema de su hija.
No le puedo decir que sea responsable ella, pero sí fue lo que reclamó Miguel Herrera, en fin.
No se va Miguel Herrera por golpear a Martinoli, se va por su carácter que lo pierde y no es culpa de Martinoli.
Y en Martinoli en qué nos reflejamos todos, en que a las grandes personalidades de nuestro país, desde la política hasta el futbol, usted es cuate, siendo periodista, mientras no lo critiquen.
Muy poca gente sabe entender la crítica sana. Si la de Martinoli fue una crítica ácida, lo más fácil es que Miguel lo hubiera buscado, se hubieran reunido y ponle que no hubieran tenido algún acuerdo, mi maestro, mi gran amigo y mi segundo padre Jacobo Zabludovsky me dijo alguna vez: “Puedo no estar de acuerdo contigo, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo”, Voltaire.
Así de fácil.