Entrar al mundo de la ciencia y el medio ambiente es más divertido de lo que se cree, esto lo comprueba la compañía El Gallinero Teatro, con la obra Ultramareadas. Junto a Fores Basura, de La Orquesta Basura, las niñas y los niños podrán bailar, divertirse y aprender al ritmo del sonido de cajas y garrafones, acompañados además por tres títeres de gran formato: un tiburón, un cardumen y una medusa.
Con escenografía elaborada a partir de objetos de reúso, las actrices Jesica Bastidas, Claudia Ivonne Cervantes y Lucía Pardo, llevarán a los infantes y jóvenes a una aventura acuática con arte clown, además de cuestionar la forma que se piensa sobre los desechos y la conglomeración de basura en los mares.
Jesica Bastidas explica que, para elaborar esta pieza, contaron con el apoyo del doctor en Ecología, Miguel Rivas Soto, quien en su momento dirigió la campaña “Océanos sin plástico”, de Greenpeace, y ahora forma parte de la organización Oceana México.
“Para esta tercera producción decidimos hablar de la ecología y el cuidado al medio ambiente por la preocupación que tenemos ante el cambio climático, la necesidad de un reacomodo de hábitos y acciones para hacer frente a este reto; trabajar junto a científicas y científicos es fundamental para tener un respaldo y sustento de los mensajes que damos”, explica Bastidas.
Conciencia a través del humor
Recibir información de científicos, confiesa, fue algo tremendamente duro porque la situación del planeta es grave, sin embargo, buscan crear conciencia por medio de la comedia física y así divulgar estos conocimientos de forma divertida.
“Rivas Soto nos brindó información tan impactante que por momentos sentimos que no había forma de salir de esto, nos dio una especie de depresión, pero pensamos ‘estamos haciendo una obra clown’, ¿cómo vamos a hacer divertido de una situación tan trágica? Al final, nos motiva que podemos generar un cambio entre el público, que se cuestionen y tomen decisiones para todos hacer frente a esto”, comparte.
Jesica, al igual que para el resto de la compañía, cree que es primordial hacer divulgación científica con el uso del humor porque es una herramienta que permite a las personas escuchar y convivir, a la vez que involucran sus emociones.
Esto lo comprobaron en su primera colaboración con la doctora en Geociencias, Susana Alanís, quien demostró en varios estudios que el conocimiento y las enseñanzas se pueden retener mejor con el uso del humor porque se combina la lógica con una emoción y el juego.
A pesar de que la pandemia complicó los hábitos de concientización por el incremento de plásticos desechables porque se les asocia con la higiene, la actriz comparte que, la respuesta a este problema, al ser sistemático, tendría que estar en todos, implementándolo desde varios ejes como el reciclaje y reutilización de desechos, así como la disminución de materiales que dañan a los océanos y el medio ambiente.
“Todo junto es la solución y eso nos llevó a preguntarnos cómo abordarlo en la obra, la cuestión es entender ¿por qué disponemos de los recursos en la forma en lo que lo hacemos? Y ¿por qué pensamos que podemos desechar y consumir tan fácilmente? Debemos de ver nuestras acciones con responsabilidad y que tienen consecuencias”, expresa.
Los niños son los mejores críticos para El Gallinero Teatro
Para la compañía El Gallinero Teatro, los niños les imponen un reto para poder armar sus espectáculos, porque siempre van dos pasos delante de ellas en cuanto a los chistes.
“Los niños son muy inteligentes, son todo un desafío porque tenemos que estar a la altura de su intelecto y rapidez, son súper afilados, sin duda, son nuestros mejores críticos por su honestidad; se agradece saber cuándo algo no está funcionando y lo tenemos que trabajar. Afortunadamente nuestra forma de hacer teatro, desde la comedia física, y nuestro interés por desarrollarnos, permite que los espectáculos siempre se estén renovando”, afirma.
Sus espectáculos también los llevan a cabo con humor incluyente dirigido a las y los jóvenes, de modo que todos puedan disfrutar de las funciones. Utilizan referencias de películas como Cuando el destino nos alcance y así hacer un guiño para que las mamás y los papás entren en este ambiente.
“Aquí hay alimento para todos y a ver quién nos cacha los chistes, dentro de la técnica del clown incorporamos las reacciones del público, una función nunca será la misma, es parte de hacerles sentir que todos somos parte de esto y son tomados en cuenta para crear algo”, abunda.
La compañía fue creada por las actrices Jesica Bastidas, Claudia Ivonne Cervantes y Lucía Pardo, quienes agradecen poder crear juntas una semilla de cambio, se apoyan y cuidan de la maternidad de las compañeras, respetan sus creencias religiosas y predican un mundo mejor desde su pequeño núcleo.
Asimismo, se sienten afortunadas por contar con grandes maestras y maestros expertos que las asesoran con las producciones, sobre todo en Ultramareadas, proyecto que ha sido el más ambicioso, hasta ahora, en cuanto a títeres, escenografía, músicos en escena; se trata de un gran paso para ellas, y para su desarrollo como intérpretes, actrices y compañía. Desean que estos alcances puedan continuar desarrollándolos para construir puentes en otros territorios del país.
“Al inicio no estábamos muy conscientes hacía dónde queríamos dirigirnos pero, hoy estamos seguras que queremos posicionar a las mujeres en roles protagónicos, tanto en las artes como en las ciencias, poner estos roles para hacer más familiar que una mujer pueda dedicarse a la física o matemáticas y tomar estas decisiones por el planeta, abrir el espacio que como mujeres tomemos estos lugares de decisión”, concluye Jesica Bastidas.