Buffalo Blanco: Rock para la carretera

Escuchar a Buffalo Blanco es sinónimo de ponerse el cinturón de seguridad, ajustarse los lentes de sol y tomar carretera con un buen soundtrack que acompañe el trayecto.

Y si esa sensación da su música, no es por mera casualidad. Además de la influencia del country rock y del rock sureño setentero (latente a través de todo "Indigo Love", su más reciente y segundo álbum), los integrantes de Buffalo Blanco llevan en la sangre esa cultura de tomar la carretera.

Escuchar a Buffalo Blanco es sinónimo de ponerse el cinturón de seguridad, ajustarse los lentes de sol y tomar carretera con un buen soundtrack que acompañe el trayecto.

Y si esa sensación da su música, no es por mera casualidad. Además de la influencia del country rock y del rock sureño setentero (latente a través de todo “Indigo Love”, su más reciente y segundo álbum), los integrantes de Buffalo Blanco llevan en la sangre esa cultura de tomar la carretera.

La banda está conformada por David Castillo, Charly Castro y Alan Robles, los tres nacidos en Monterrey, ciudad que está a tan solo unas seis horas de la frontera con Texas. Quizá esa cercanía con la cultura y la música estadounidense ha provocado sin querer que buena parte de sus canciones estén en inglés, lo que valida de alguna manera su sonido, como nos confirman Alan y David en entrevista. 

Esa combinación de influencias toma forma en tracks como “Don’t Get Fooled By Love”, que suena a lo que pasaría de tener en el mismo estudio a Rooney haciendo la base rítmica y a Chicago incorporando sus trompetas. 

O como si en “I’ll Know The Way” el texano Ben Kweller aportara su repertorio más pesado de guitarras para acompañar una de las canciones más “radiables” del álbum. 

Por si todavía no les sonaban sus nombres, Buffalo Blanco nació como un proyecto alternativo de Charly Castro, quien es bajista de Jumbo, y David Castillo, músico que ha colaborado más recientemente con Chetes. Alan Robles, guitarrista de Niña, se les unió poco después para conformar un power trío que explora sin ataduras el tipo de música que más les gusta escuchar y hacer. 

Una de las dos canciones en español incluidas en “Indigo Love” es “Lobos”, otro ejemplo de la estructura de canciones que crea Buffalo Blanco: listas para escucharse en la radio. Aquí lo que funciona muy bien es el coro en semiaullido.

En total, casi 55 minutos en 13 tracks grabados en unos cuantos días. Buffalo Blanco quizá surgió como un proyecto alterno, pero con dos discos bajo el brazo y cuatro años de estar tocando juntos con todo el bagaje musical que cada uno aporta, están listos para ganarse al público por cuenta propia.

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