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Llegó el momento de poder destruir los monstruos que creó Howard Phillips Lovecraft, uno de los escritores de horror cósmico más grandes de la historia. Para quienes conocen la literatura de este autor, tenemos el lugar perfecto, y quienes escucharon el nombre por primera vez, este su día de suerte.
Vázquez, quien conoció el arte del autor estadounidense a los 14 años y se declaró fan desde entonces, confiesa con una clara sonrisa en el rostro que él es el único, junto con su esposa, en abrir el primer café en la Ciudad inspirado en los diversos mundos terroríficos que inundaban el pensamiento del joven escritor.
Café Lovecraft es un lugar para todos, sin embargo, se podría dividir en dos tipos de consumidores: los que obviamente son fans de Lovecraft y de la literatura de terror, pero por otro lado también está el público metalero ghost, que realmente tiene espacios muy reducidos dentro de la oferta cultural de la Ciudad de México.
Las puertas de Café también están abiertas para el público que le gusta la cerveza artesanal, de las cuales hay más de 20 tipos en este espacio, y de quienes la comida temática es su debilidad.
Entre la variedad de pasteles están los Cthulhus, mantecadas en forma de cráneos rellenas de chocolate o frambuesa con tentáculos de fondant saliendo de la boca, imitando, precisamente a uno de los monstruos de Lovecraft. Además tienen Herejes, mantecráneos con cubierta tanto de chpcolate blanco como oscuro, relleno de frambuesa, y Fridas, pan de nuez relleno de chocolate con unas flores dulces de decoración.
Entre sus cupcakes, están los también inspirados por Cthulhum con pan sabor vainilla y relleno de frambuesa, con una capa de fondant de chocolate, la cual sostiene tentáculos que sobresalen del panqué.
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