Cocktail de Nervios: música para viajar a través del tiempo
La banda de swing y jazz que incluye en sus rolas géneros contemporáneos como el rock o funk se encuentra estrenando su tercer material discográfico llamado Tibirí Shim Sham Tururú
Fernando FrancoUna banda inclusiva, en toda la extensión de la palabra, esa es Cocktail de Nervios. La música que derrochan en los escenarios más diversos -desde una esquina, hasta un teatro-, evoca a esos ritmos bailables que se escuchaban a mediados de siglo, un poco más, un poco menos, en las grandes urbes, como el swing y jazz.
Con un bombo poderoso, aderezado de riffs de guitarra que llaman al baile, un clarinete y las notas de un contrabajo que hacen vibrar el oído, corazón y que evocan los sonidos que escapaban de uno que otro cabaret, hoy extintos, el Cocktail de Nervios se ha posicionado ya dentro de la difícil pero gozosa escena independiente musical de México.
Reporte Índigo platicó con Rey Aguilar, pianista y guitarrista de la banda, quien confesó que el objetivo del proyecto es revitalizar el swing y el jazz entre los escuchas más jóvenes, cuestión loable, pero difícil ya que son catalogados como géneros para cierto grupo de personas, de más edad.
“A veces catalogan al jazz como música para elevador, para personas grandes. Lo cierto es que en nuestra banda buscamos gustar a la gente con la mezcla que realizamos. Empezamos tocando en la calle, la gente bailaba, aplaudía y fue allí cuando decidimos llevar el proyecto a otras dimensiones agregando toques de rock, funk y hasta cumbia”, afirmó Rey.
En este momento, tras 7 años de rolar de escenario en escenario, el Cocktail de Nervios se encuentra promocionando su tercer disco titulado “Tibirí Shim Sham Tururú”, nombre que hace alusión a la forma de bailar swing, la fiesta y la pachanga y sí, al clásico sonido del Metro que a todos pone a correr.
Nos vamos más por la música instrumental, por lo bailable, sin embargo, sabemos que es importante la interacción con el público y en nuestros shows siempre la palabra se hace presente para conectar. En cuestión de composición alguien lleva la canción, la armonía y entre todos interactuamos para componer, para ingresas algunos ritmos contemporáneos y, lo más importante, los sampleos.
En Tibirí Shim Sham Tururú los sampleos de películas como Star Wars o El Santo, y también las voces de escritores, como Julio Cortázar, se hacen presentes. De este material ya circulan en las plataformas dos sencillos: Señor Púrpura y Chamuco, del cual el video se puede ver en YouTube.
Sobre su camino en la música independiente y su insistencia en seguir arriba de los escenarios Rey fue claro: “el proyecto ha pasado por varias etapas, cambios de integrantes; lo curioso es que de un año para acá le dimos un giro a la banda, hemos estado en lugares importantes, lo que nos ha dejado enseñanzas y madurez en cuestión escénica”.
La modernidad ha alcanzado a la música con la aparición de redes de difusión como Spotify o iTunes y en este sentido el guitarrista considera que el Cocktail de Nervios seguirá publicando discos porque las personas que han visto su material en físico “se han enamorado de él”.
“Trabajamos mucho en el diseño, tratamos de realizar cosas vintage, presentarlo como un acetato pequeño. A la gente le gusta tener un objeto y más con nuestra música que evoca recuerdos, que te lleva a cuando eras pequeño, a momentos gratos. Hace unos días tocamos una canción que se llama Bonita, que inmortalizó Tin-Tan, y una señora se acercó a nosotros llorando pues le recordó a su mamá, por lo que terminó llevándose el disco. Buscamos, siempre, dejar algo en las personas”, confesó Rey.
¿Por qué hay que escuchar al Cocktail de Nervios?
El guitarrista afirmó que su banda lleva a cualquier lado por medio de la música, a un viaje a través de los años veinte, treinta y hasta el futuro, ya que en la actualidad construyen su sonido incluyendo sintetizadores, saxofones, contrabajo eléctrico y una batería roquera.
“Es lo nuevo de lo viejo”, finalizó diciendo Rey.
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