Todas las miradas latinoamericanas estaban puestas en Roma, pero en la gran noche de los premios Oscar, Green book: Una amistad sin fronteras terminó por romper el encanto que se había construido en torno al filme de Alfonso Cuarón.
La Academia prefirió premiar a un largometraje que habla de la discriminación racial, en lugar de a una cinta que pertenece a Netflix, ya que, según los expertos consultados por Reporte Índigo, esto habría sido aceptar y cobijar a la compañía de streaming como un estudio equiparable a los grandes de Hollywood.
Roma se llevó tres de los 10 premios Oscar a los que estaba nominada. La cinta suma más de 110 preseas internacionales y pasa a la posteridad como la primera producción mexicana en ganar en la categoría de Mejor Película Extranjera, anteriormente Alejandro González Iñárritu había estado nominado con Biutiful, en 2011.
Con un gran abrazo entre amigos, fue como Guillermo del Toro recibió a Cuarón en el estrado, al anunciar al ganador en la categoría de Mejor Director; el realizador de La forma del agua bromeó al decir que el cineasta ganador tenía un nombre que podía pronunciar.
El apremio mexicano estaba puesto en Yalitza Aparicio, sin embargo, la actriz se quedó con las manos vacías, ya que la presea estaba destinada a Olivia Colman, quien sorprendió al ganarle a la veterana Glenn Close.
El reflector sobre Cuarón
Aunque Roma no se logró llevar los premios a Mejor Actriz de Reparto y Mejor Diseño de Producción, los ánimos no decayeron para el público mexicano, ya que Alfonso Cuarón se coronó con Mejor Cinefotografía.
Cuando el realizador subió al estrado, agradeció al fotógrafo Emmanuel “El Chivo” Lubezki, a quien originalmente había invitado para estar encargado de la dirección de foto, pero no pudo estar presente en la grabación de Roma debido a compromisos laborales.
“Si esta película fue creada por mis propios recuerdos, la cinta fue creada a través de los recuerdos de lo que este gran maestro de la cinematografía nos ha dado. Es bien sabido que en la oficina de Billy Wilder había un cartel que decía ‘¿Qué habría hecho Lubitsch?’ Y para mí, fue cuestionarme ‘¿Qué habría hecho el Chivo Lubezki?’ Así que esto también es para ti, Chivo. Y muchas gracias México. Mi familia y Jonás, Bu y Olmo. Los quiero muchachos”, expresó Cuarón.
La noche continuó y Roma dejó atrás las preseas a Mejor Diseño de Producción, a manos de Pantera Negra, además de Mejor Mezcla y Edición de Sonido que fueron arrebatadas por Bohemian Rhapsody, así como Mejor Guión Original que se lo llevó Green Book, pero Cuarón logró repuntar cuando se consagró con las estatuillas a Mejor Película Extranjera y Mejor Director.
¿Sin necesidad de presentador?
Haciendo alarde de una de las nominadas, la banda británica Queen abrió la noche de los Oscar con el tema “We’ll rock you”, para después pasar a “We’re the champions”. A falta de un maestro de ceremonias este año, así fue como el acto comenzó sin preámbulos en el Teatro Dolby de Los Ángeles, California.
La agrupación, que inyectó toda su fuerza y carisma, logró impulsar el buen augurio a su favor, ya que el largometraje biográfico inspirado en la vida de Freddie Mercury ganó cuatro estatuillas en la premiación.
Con su intervención se aprovechó el momento para hacer un pequeño guiño hacia las políticas xenofóbicas del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. “No hay anfitrión esta noche. No habrá una categoría de película popular, y México no está pagando por el muro”, afirmó Rudolph.
Mejor Película
Green Book: Una amistad sin fronteras
Mejor Director
Roma Alfonso Cuarón
Mejor Guión Original
Green Book: Una amistad sin fronteras
Mejor Fotografía
Roma Alfonso Cuarón
Mejor Película Extranjera
Roma Alfonso Cuarón
El escándalo detrás de Green Book
Green Book, la Mejor Película de los premios Oscar 2019, posiblemente no contó la verdadera historia entre Frank “Tony Lip” Vallelonga y Don Shirley, sus dos protagonistas, quienes fueron interpretados por Viggo Mortensen y Mahershala Ali, respectivamente.
“Mi hermano nunca consideró a Tony como su ‘amigo’; era un empleado, su chofer”, sentenció Maurice Shirley, a través de una supuesta carta que envió a medios estadounidenses.
Al respecto, Nick Vallelonga, quien basó la historia en la experiencia de su padre, aseguró que no consultó a la familia del cantante porque fue el mismo intérprete quien supuestamente se lo prohibió. “Nadie más estuvo allí, excepto tu padre y yo”.