¡Cuídate de las enfermedades respiratorias!

La gripe es la enfermedad respiratoria contagiosa más frecuente en esta época, generalmente incluye tos, secreción nasal, dolor de garganta, de cabeza y fatiga; Johns Hopkins Medicine aclara algunos mitos que rodean a este padecimiento
José Pablo Espíndola José Pablo Espíndola Publicado el
Comparte esta nota

Padecimientos como la gripa, faringitis, laringitis, bronquitis, sinusitis aguda y neumonía, son los más frecuentes durante la temporada invernal.

En estos meses del año se presentan con regularidad infecciones de vías respiratorias altas (nariz, senos paranasales, faringe, amígdalas y oído), sobre todo en niños y adultos mayores. Muchas de ellas se complican con problemas respiratorios bajos (laringe, tráquea, bronquios y pulmón).

El principal motivo para desarrollarlos es la exposición al frío y a la poca humedad que hay en el ambiente, lo que facilita que los virus y bacterias se alojen en la garganta, se bajan las defensas y estos agentes provoquen un cuadro de inflamación o de infección.

Lo anterior se puede prevenir con una buena alimentación y con suficiente consumo de líquidos, además de cuidarse de los cambios bruscos de temperatura, abrigarse y no respirar de manera directa el aire frío.

Ante cualquier malestar es importante que las personas acudan al médico y nunca se automediquen.

Los médicos recomeindan que los pacientes que presenten un cuadro de vías respiratorias no acudan a lugares públicos para así evitar el contagio, además de que no deben saludar de mano, tienen que cubrirse la boca con el antebrazo al toser o estornudar y lavarse las manos con frecuencia durante sus actividades diarias.

En el caso de la gripe, que es la enfermedad respiratoria contagiosa más frecuente en esta época, causada por diferentes cepas de virus de la influenza, los síntomas generalmente incluyen tos, secreción nasal, dolor de garganta, dolor de cabeza, dolores musculares y fatiga, aunque no todo el mundo muestra los mismos síntomas.

La severidad de la gripe puede ir de leve hasta casos graves que conducen a la hospitalización o incluso la muerte. La temporada de mayor impacto para la gripe es generalmente entre diciembre y febrero.

Algunos mitos sobre la gripe y la verdad sobre el virus

MITO La vacuna contra la gripe puede transmitir la enfermedad.

VERDAD Cada año, la vacuna antigripal se fabrica a partir de componentes del virus de la gripe (o influenza) que no pueden transmitir la infección. Una vez administrada, la vacuna tarda de una a dos semanas en brindar protección inmunitaria contra el virus.

MITO Las personas sanas no necesitan la vacuna contra la gripe.

VERDAD Se recomienda que los menores de 6 meses a 19 años de edad, las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades crónicas o mayores de 49 años de edad se vacunen todos los años, puesto que son las más vulnerables. También se recomienda la vacuna a las personas sanas, especialmente a los profesionales de la salud.

MITO No es necesario vacunarse contra la gripe todos los años.

VERDAD Puesto que el virus de la gripe cambia (o muta) cada año, la vacuna antigripal se reformula anualmente para brindar protección contra las cepas dominantes más recientes del virus. Por lo tanto, es importante vacunarse para asegurarse de tener protección contra las cepas que tienen mayor probabilidad de causar un brote epidémico de gripe cada año.

MITO Las mujeres embarazadas no pueden recibir la vacuna contra la gripe.

VERDAD La vacuna antigripal se les recomienda a las mujeres embarazadas, porque el embarazo puede ocasionar cambios en el sistema inmunitario, el corazón y los pulmones que aumentan el riesgo de contraerla. La infección respiratoria grave y las fiebres altas asociadas a este padecimiento pueden conducir a complicaciones serias, incluyendo el parto prematuro. Vacunarse también puede proteger al bebé durante sus primeros meses de vida, etapa en la cual es muy pequeño para recibirla, pero es muy propenso a enfermarse.

MITO La gripe puede incluir síntomas gastrointestinales, como náuseas, vómitos y diarrea.

VERDAD Muchas veces, el término “influenza estomacal” (gastroenteritis viral) se usa para describir enfermedades que se presentan con náuseas, vómitos o diarrea. Si bien, estos síntomas pueden relacionarse con la gripe o influenza, más frecuentemente en niños que en adultos, estos problemas rara vez son los síntomas principales de la influenza. La gripe es una enfermedad respiratoria, no una enfermedad estomacal o intestinal.

MITO Las personas alérgicas al huevo no pueden recibir la vacuna contra la gripe.

VERDAD Existen disponibles vacunas sin proteínas de huevo, pero la mayoría de las personas alérgicas al huevo no tendrán reacciones adversas si reciben una vacuna que lo contiene

MITO La gripe es sólo un resfrío fuerte.

VERDAD La gripe o influenza pueden provocar los síntomas de un resfrío fuerte, pero no deben tomarse a la ligera. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) la temporada pasada más de 900 mil personas fueron hospitalizadas y cerca de 80 mil murieron por esta causa.

MITO Lo único que se necesita para estar protegido contra la gripe es recibir la vacuna.

VERDAD Aparte de vacunarse, las personas pueden aumentar al máximo su protección si se lavan las manos con frecuencia y evitan entrar en contacto con personas enfermas. Si se estuvo expuesto a la enfermedad antes de recibir la vacuna, es importante preguntar al médico sobre los medicamentos antivirales.

MITO No es posible transmitir la gripe si uno se siente bien.

VERDAD Casi el 30 por ciento de las personas portadoras del virus de la influenza no tienen ningún síntoma.

MITO Si contrae la gripe, quiere decir que la vacuna no fue efectiva.

VERDAD A diferencia de las vacunas que ofrecen el 100 por ciento de protección, como las del sarampión y la polio, la antigripal sólo tiene aproximadamente un 60 a 90 por ciento de efectividad. Esto se debe a que cada año circulan múltiples cepas del virus y a los investigadores les resulta difícil predecir exactamente cuáles serán las cepas dominantes

MITO Si tiene gripe con fiebre alta que dura más de un día o dos, puede que necesite antibióticos.

VERDAD Los antibióticos son efectivos contra las bacterias, pero no sirven para tratar las infecciones virales como la gripe. Sin embargo, las infecciones bacterianas pueden ocurrir como una complicación del virus de la gripe.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil