Cultura, sin futuro para Presupuesto 2021

A excepción del Proyecto Prioritario Chapultepec, las instituciones culturales del país salieron perjudicadas económicamente para el siguiente año, de acuerdo con el PPEF. Esa decisión, aseguran especialistas, sólo hará que el fomento a la historia y al arte sean los rubros más dañados, los cuales podrían salvarse si los funcionarios alzan la voz
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
Comparte esta nota

Cultura volvió a ser uno de los Ramos menos beneficiados por parte del ejecutivo. El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) 2021, dado a conocer el pasado 8 de septiembre, sólo le marcó un monto económico para subsistir, pero no para desarrollarse.

Aunque en el PPEF se establece que el presupuesto a Cultura en 2021 aumentará levemente en comparación del de este año, de 13 mil 517 millones a 13 mil 985 millones, la mayoría de sus instituciones salieron perjudicadas.

Al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por ejemplo, se le proporcionarán 3 mil 820 millones de pesos, cuando en 2020 se le habían brindado 3 mil 918 millones.

Esta institución ha sido una de las que más se han enfrentado a una lucha constante contra el presupuesto, y no desde hace un par de días, sino desde hace meses, cuando, en mayo pasado, su director Diego Prieto alertó sobre la disminución que el gobierno había implementado un mes antes debido a la política de austeridad.

Al igual que el INAH, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) sufrió una disminución en el PPEF en comparación del presupuesto anterior, de 3 mil 259 millones a 3 mil 206 millones de pesos.

Al respecto, Carlos Lara, analista de la comunicación y la cultura, asegura que, además de que el presupuesto en general para 2021 en definitiva no es suficiente para el Ramo 48, son las instituciones, como el INAH y el INBAL las que más han salido perjudicadas, sobre todo porque los más agraviados serán a sus trabajadores, desde investigadores hasta artistas y gestores.

“El presupuesto debería estar aplicado a las instituciones culturales, es decir, al INAH, al INBAL, al desarrollo de los proyectos que tienen. Reducirles el presupuesto es ir en contra de la historia, de su preservación, así como de los investigadores que se dedican a difundirla, a fomentar la creación”, resalta.

Para el analista, la decisión del ejecutivo en torno el PPEF es sólo la confirmación de que no se entiende la importancia que hay en este Ramo, “en el sector creativo que lo único que ha dado son satisfacciones”, como el cine.

En el Proyecto de Presupuesto de 2021 también se destacó que el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) será uno de los menos beneficiados, al recibir 191 mil 6 millones de pesos. En 2020 se le brindaron 237 mil 8 millones.

Por debajo del Imcine, aparece el Fondo Nacional para el Fomento a las Artesanías, con 118 mil 3 millones, y Televisión Metropolitana S.A. de C.V. con 130 mil un millón de pesos.

(El presupuesto) no es suficiente, sin duda, porque, además, en un inicio el gobierno venía con el discurso del poder de la cultural, pero del poder de un solo hombre, el presidente, y no lo considero tampoco justo porque tenían una propuesta que era Cultura Comunitaria, que era el programa insignia, y ahora se les vino la ocurrencia de Chapultepec
Carlos LaraAnalista de la comunicación y la cultura

El proyecto sobresaliente de Cultura

Dentro del PPEF 2021, uno de los proyectos que más tuvo presencia económica, en comparación con otras instituciones, fue el Proyecto Prioritario Chapultepec, el cual recibirá para 2021 3 mil 508 millones.

En entrevista con Reporte Índigo, Carlos Lara asegura que este proyecto sólo hará que se voltee a ver más al centro del país, cuando lo que se requiere es detonar y generar un dinamismo a diferentes zonas de la República, como se había planteado inicialmente en el gobierno.

“Se decía que este trabajo iba a ser digno de acupuntura, pero no es así, porque lo que hicieron fue poner todas las agujas donde no hay dolor, que es Chapultepec, donde además hay oposición de los vecinos, pero al igual que el Tren Maya, pasan por encima de las comunidades originarias, de los planes parciales y de los derechos ambientales. Es la decisión de una sola persona y eso se me hace más lamentable que el presupuesto en sí”, señala el analista.

Además, puntualiza que al enfocarse en Chapultepec se le está invirtiendo dinero donde menos se necesita, ya que tampoco cuentan con una justificación sociocultural entendible para seguir desarrollando ese proyecto.

De acuerdo con Lara, la única alternativa viable para hacer entender a las autoridades que otras instituciones deben ser igual o más de apoyadas que Chapultepec, es que se alce la voz.

“¿Qué podría hacer la diferencia? Funcionarios con carácter, que digan ‘no podemos avalar esto, perdón’. Y no digo que se tiren al vacío o renuncien, pero sí levantar la voz. La secretaria de Cultura federal no lo va a hacer, ella es una empleada del presidente y así se asume”, finaliza Carlos.

También puedes leer: Cultura, con esperanzas de un aumento en PEF

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil