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Por años, la psicología ha clasificado a los asesinos en impulsivos y premeditados. Ahora, con el poder de las redes sociales, esa categorización se puede desglosar en seis tipos de asesinos de Facebook. Ya que algunos de ellos utilizan la plataforma creada por Mark Zuckerberg para cazar a sus víctimas o inclusive para alardear en línea con escalofriante regocijo sobre sus crímenes, de acuerdo a un estudio publicado en Howard Journal of Criminal Justice.
La investigación realizada por la Universidad de Birmingham, en Reino Unido, estableció que la red social ha tenido cierta influencia en algunos casos de asesinatos e inclusive ha determinado cómo actuarán los criminales para realizar sus actos.
David Wilson y Elizabeth Yardley, autores de la investigación y doctores en criminología, dicen que esos seis perfiles psicológicos se han repetido en diversos crímenes que han acaparado la atención mediática mundial.
Los doctores en criminología analizaron 48 “asesinatos de Facebook”, como los nombraron, acontecidos en todo el mundo, entre los años 2008 y 2013.
Y es que Facebook no solo es una plataforma online que conecta al mundo entero, también es el lugar en donde las personas con problemas mentales, desequilibrios emocionales y hasta trastornos de personalidad observen posibles víctimas o hablen de sus actos de manera “pública”, y sin remordimientos, según las conclusiones del estudio de Wilson y Yardley.
Las resultados del estudio indican que el 52 por ciento de los asesinatos relacionados a redes sociales ocurrieron en Gran Bretaña, y el 31 por ciento en Estados Unidos.
Pero México no está exento, en Monterrey, Nuevo León, Roberto Santos Martínez confesó el asesinato de la que fuera su suegra, Lucila Reyes Villanueva, vía un post en Facebook.
Después se divirtió en antros de la ciudad, hasta que fue capturado por la policía. Santos Martínez entró en el domicilio de Reyes Villanueva, la golpeó con una sartén y con un objeto de fierro hasta matarla, el joven asesino publicó en la red social un mensaje que entre sus líneas incluía: “Asesiné a una mejor amiga”.
Los seis tipos de asesinos -y usuarios- de facebook son:
> Reactor
Es el perfil “más simple”. Son personas que, como su nombre lo dice, reaccionan a contenido en línea y atacan a sus víctimas offline, es decir, en persona. El 27 por ciento de los “asesinos de Facebook” fueron clasificados como “reactores”.
> Antagonista
Este tipo de criminal participa en publicaciones de manera hostil en Facebook, después actúa violentamente en persona con las personas a las que atacó virtualmente. Un caso sonado es el de Diego Lara Berrocal, quien fue atacado y apuñalado luego de haber discutido en Internet por el videojuego “Audition latino”, en enero de este año.
> Informante
El perfil del informante corresponde a las personas que suelen informar o comentar en su muro o status, que van a cometer un acto ilegal o un asesinato. Will Cornick, el joven inglés que apuñaló este lunes a su maestra Ann Maguire, entra en esta categoría dado a que durante tres años planeó el asesinato de la docente. De hecho, en febrero de este año escribió en un mensaje en Facebook a un amigo que Maguire “merecía más que la muerte, más que dolor”. Otro ejemplo del asesino de Facebook informante es el de LaShanda Armstrong, quien se despidió en la red social de sus amigos antes de lanzarse junto a sus tres hijos al Río Hudson en coche, en el 2011.
> Fantasioso
Los asesinos fantasiosos confunden la realidad con la fantasía o ciencia ficción. Como fue el caso de Marcos Twitchell, quien se creía Dexter, el personaje de la popular serie de televisión homónima. Marcos tenía personalidad psicópata y le quitó la vida a Johnny Altinger en un estilo de garage rentado, que aparentaba ser el “kill room” (o cuarto para matar), del asesino serial de la serie.
> Depredador
El asesino depredador crea un perfil falso de la red social para atraer a sus víctimas, después se reúne con ellas en la vida real y las mata. Este tipo de asesino es astuto y se aprovecha de debilidades emocionales de las personas para “volverse” amigo de los usuarios en este caso vulnerables, para luego atacarlos en persona, sorpresivamente.
El británico Peter Chapman, en el 2010, creó un perfil ficticio para atraer a Ashleigh Hall, una joven de 17 años. Chapman se hizo pasar por un apuesto adolescente, pero en realidad era un hombre de 33 años, chimuelo, condenado por doble violación, que había estado viviendo en su auto. Hall fue secuestrada, violada y asesinada por Peter cuando se vieron “offline”.
> Impostor
Cinismo puro. El criminal impostor, después de quitarle la vida a la víctima, entra a su cuenta de Facebook como cualquier usuario y en lugar de publicar una fotografía o algo similar, hace creer al resto de contactos que la persona sigue viva. El mejor ejemplo, según una publicación en The Telegraph, es el de Andrew Lindo, quien asesinó a su pareja en Inglaterra y, posteriormente, entró a su Facebook para escribir como si se tratara de ella, alegando que “había dejado a su novio y se había marchado a vivir a las Islas Canarias”.
