La dieta Keto es un esquema de alimentación que deja de lado al consumo de azúcares para agilizar el metabolismo y perder peso.
La popularidad de este régimen de nutrición que provoca la rápida pérdida de peso, se ha adquirido sobre todo entre los jóvenes, quienes desconocen que debido a que el organismo necesita energía, este lo toma de las proteínas de los músculos, por lo que se pierde masa muscular, no grasa.
De acuerdo con Raquel Valenzuela Argüelles, nutriologa de la Dirección General del Deporte Universitario de la UNAM, ‘este tipo de dietas no promueven los buenos hábitos de alimentación o el objetivo a largo plazo, ya que suelen llevarse por periodos de tiempo no prologados’.
Para tener un cuerpo bien nutrido, explica Valenzuela Argüelles, lo primero es tener un cuerpo bien nutrido, lo primero a cubrir es la energía, pues de no ser así, ‘el organismo echará la mano de las proteínas, pero no sólo de las que se ingieren , sino también de las que se encuentran en los músculos’.
Consecuencias en la salud
Debido a que se consume un exceso de proteína, a largo plazo se puede experimentar un efecto similar al de una persona diabética que carece de glucosa necesaria para llevar a las células, por lo que se puede provocar una descompensación.
La dita Keto puede propiciar la pérdida de masa muscular, tejido graso y agua en grandes cantidades.
Respecto a los ayunos, la nutriologa de la UNAM expresó que aunque se asegura frecuentemente que son benéficas porque desintoxican el cuerpo, el organismo es sometido a un elevado estado de estrés.
De acuerdo con Valenzuela, el ayuno intermitente, produce sustancias tóxicas que desencadenan reacciones químicas que, de otro modo, no se presentan en el cuerpo.