Con anillos en cada uno de sus dedos y un paliacate azul marino con estrellas blancas en su cabeza, de la cual cae una frondosa cabellera negra que combina con su vestimenta oscura, es como, a los 66 años de edad, David “Dave” Evans se presenta ante el público para seguir rockeando y hacer tributo a la icónica canción “Highway to hell”.
Aunque él no compuso la canción de AC/DC, que hace 40 años lanzó la agrupación australiana, Evans se la apropia en las tocadas en vivo que realiza para revivir aquellos momentos en los que fugazmente perteneció al ensamble creado por los hermanos Young, ya que fue miembro fundador en 1973.
Evans apenas permaneció el primer año de arranque con los australianos y cantó el sencillo “Can I Sit Next to You, Girl”, pero poco después dejó a AC/DC para formar su propia agrupación, Rabbit, y aunque han pasado más de 45 años, sigue recordando esos días como si hubieran sido ayer.
“Si miras atrás, las bandas de los 50, 60 y 70, eran demasiado buenas, porque tenías que serlo, era una competencia, había muchos lugares donde tocar, mucha música y todo mundo estaba ahí, nadie se quedaba en casa a dormir, así era, muy diferente a ahora”, comenta el vocalista, en entrevista con Reporte Índigo.
Para Evans, antes eran las disqueras quienes se encargaban realmente de impulsar a los artistas, lo que creó la gran diferencia con lo que ocurre con el género musical hoy en día. “Antes, en aquellos años, las disqueras querían grupos originales, todos tenían que ser así, y hacer música así, pero además tenían que ser originales en su imagen; entonces, esto entusiasmaba a los fanáticos, había mucha música nueva, era un tiempo excitante y muchos de nosotros tuvimos suerte en tener un disco”, platica el artista.
¿Acaso el rock sigue siendo disruptivo como lo fue en su inicio? Evans ve que este género en su forma natural sigue siendo el mismo, pero además reafirma que también no todo en la vida era tener una placa discográfica.
“Mucho de esto sigue sonando igual en estos días, porque también se sigue manteniendo esa esencia original y diferente, así como también no importaba y sólo salíamos a tocar, aunque no tuviéramos un contrato, eso era lo de menos, íbamos y tocábamos muchos shows, cualquier día de la semana, era un estilo de vida que permanece hasta hoy, éramos guerreros del fin de semana”, comparte.
De si acaso Evans tiene algún episodio que desee cambiar de su trayectoria profesional o personal, el intérprete se siente contento de seguir en la industria musical, además de que espera volver a México para 2020.
Durante todo diciembre Dave Evans estará dando una gira en México, presentándose en ciudades como Guadalajara y Monterrey, después de que tuvo una estadía en el país en 2019 y recorrió Zacatecas, Aguascalientes, Ciudad de México, Oaxaca y más localidades.
Dave Evans También va por blues, acústico y hasta sinfónico
Complementando el hard rock y tomando un camino también por el ritmo del blues, es como a Evans le gusta darle variedad a su carrera profesional, ya que en 2013 hizo mancuerna con el guitarrista texano John Nitzinger para producir Revenge, álbum que junta ambos géneros musicales.
“Me pidió hacer un disco de sus canciones, lo que me pareció un grandioso privilegio y fuimos al estudio y como él es del ritmo texano-blues-rock, y yo soy mitad australiano con hard rock, fue un trabajo brillante, para nada intenté cantar como Johnny, lo hice como yo y él tocó su estilo”, dice Evans.
El vocalista no descarta en un futuro hacer versiones sinfónicas de sus éxitos profesionales, además de que comenta que también le gusta hacer presentaciones en acústico, para darle variedad a su show, en el que interpreta varias de las canciones tempranas de AC/DC.
“¿Me gustaría hacer un sinfónico? Claro, acabo de hacer un concierto acústico, estuve en Fort Worth, Texas, y tenían un piano, y así hicimos una canción de AC/DC, de cuando Bon Scott estaba vivo, así que me aventé ‘Highway to hell’ en piano y yo nada más”, agrega.