No hay imagen disponible

Es sólo un juego

Cuando el fanatismo por el futbol se vuelve obsesión, se activa el sistema nervioso simpático, afectando la salud

El futbol es de los deportes –y actividades– que más despiertan emociones, reacciones y pasiones en el ser humano. Angustia, alegría, enojo y tristeza, durante un partido de futbol los amantes de este deporte viven todo tipo de sensaciones a flor de piel.

De acuerdo a un estudio de la Universidad de Coimbra, en Portugal, el amor por el futbol despierta los mismos mecanismos y sentimientos que el amor por la pareja.

“El futbol despierta emociones, a veces irracionales, que cruzan la frontera entre el amor tribal y el fanatismo (…) hemos podido comprobar que los sistemas neuronales que se activan son muy semejantes al del amor romántico”, señalaron los expertos.

Pero cuando la pasión se convierte en fanatismo la salud se ve seriamente afectada, ya que se convierte en obsesión y el hincha tiene pensamientos absolutistas, creencias irracionales, emociones incontrolables, baja tolerancia a situaciones frustrantes y poco autocontrol.

El temor a que pierda el equipo provoca pensamientos y emociones negativos, aumentando la tensión y alerta en el Sistema Autónomo Simpático, disparando síntomas como taquicardias, sudoración, opresión en el pecho y palpitaciones.

A su vez, se desencadenan el estrés y la ansiedad.

Te puede interesar
Psicología Memorias de ficción En un reciente estudio, especialistas británicos revelaron que cerca del 40 por ciento de los recuerdos de la primera etapa de vida son falsos, por lo que nuestros pensamientos podrían carecer de un sentido de realidad o precisión en comparación con lo que realmente sucedió
Psicología El valor de un secreto Cuando alguien nos confía una parte privada de su vida creamos vínculos emocionales que hacen sentirnos más cercanos a esa persona, pero también esto representa una carga ya que el sentido de responsabilidad recae en nosotros por compartir información encriptada