El estrabismo pudo llevar a la genialidad a Leonardo da Vinci

Parte de las obras que analizaron los expertos, son tres estatuas hechas por Andrea del Verrocchio en las que se puede ver que uno de los ojos tiene la mirada desviada.
Indigo Staff Indigo Staff Publicado el
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Tras analizar varios retratos y autorretratos del pintor Leonardo da Vinci, neurocientíficos británicos llegaron a la conclusión de que el artista padecía estrabismo, enfermedad que le facilitó el poder representar la profundidad en superficies planas.

Sin embargo, tanto paleopatólogos como oftalmólogos consideran aventurado diagnosticar que da Vinci tuviera estrabismo solo viendo unos cuadros en los que ni siquiera se sabe con certeza si él hizo de modelo.

Parte de las obras que analizaron los expertos, son tres estatuas hechas por Andrea del Verrocchio en las que se puede ver que uno de los ojos tiene la mirada desviada. También, esa condición es evidente en dos de los cuadros de Leonardo: San Juan Bautista, pintado en torno a 1508-1513, y el Salvator Mundi, la obra más cara de la historia.

Christopher Tyler, profesor de City, University of London, señala que Incluso en dos de sus dibujos más sobresalientes, el renacentista Hombre de Vitruvio y su Autorretrato, ya anciano, se ve cierta divergencia ocular.

“El análisis del alineamiento de los ojos concuerda con un diagnóstico de exotropía intermitente, lo que sugiere que Leonardo da Vinci tenía una tendencia exotrópica de unos -10.3º en reposo, pero que podía volver a ortotropía cuando enfocaba, como cuando revisa su propio rostro para un autorretrato”, describe Tyler en su artículo publicado en JAMA Ophthalmology.

El investigador británico explica que la exotropía intermitente se asocia con una buena visión estereoscópica cuando los ojos están rectos, pero se pierde cuando el ojo se desvía.

“Si ves el mundo con solo ojo, debido a la supresión del otro cuando se desvía, la escena visual parece mucho más plana y, por tanto, más fácil de trasladar al lienzo”, afirma Tyler.

Sin embargo, para muchos investigadores del mundo, este estudio es arriesgado e incluso ingenuo, ya que no hay forma de saber a ciencia cierta a partir de cuadros la condición de una persona.

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