México es uno de los 10 países con más casos de acoso o espionaje digital en el mundo, según la empresa de seguridad Securelist. El llamado stalkerware apareció en el mundo de la seguridad digital hace media década y consiste en aplicaciones móviles que extraen información proveniente de os celulares, ya sea de mensajes SMS, llamadas telefónicas realizadas y recibidas, correos electrónicos o incluso del historial de sitios web visitados.
De acuerdo con el Instituto del Derecho de las Telecomunicaciones (IDT), hay otras aplicaciones que son más invasivas y pueden ordenar al dispositivo electrónico tomar fotografías y grabar audio sin que el usuario esté enterado.
“Toda esa información es almacenada y enviada a servidores externos para que la persona que instaló esta aplicación pueda acceder a los datos extraídos con solo entrar en una página web”, explican.
Algunos de los códigos maliciosos más usados en México son los denominados Monitor.AndroidOS.MobileTracker.a y Monitor.AndroidOS.Cerberus, que se encuentran dentro de aplicaciones móviles que se promocionan como sistemas para el seguimiento de dispositivos digitales.
Algunas de estas aplicaciones se promocionan como herramientas para el monitoreo de menores de edad y evitar que sean sustraídos o acudan a lugares no autorizados.
Sin embargo, esta oportunidad ha sido aprovechada por criminales o familiares para verificar la lealtad de sus cómplices y parejas y controlarlos, por ejemplo, la organización Human Rights Watch denunció que el gobierno de un país de Medio Oriente desarrolló una aplicación que notifica a los “guardianes legales” de una mujer si ella solicita un pasaporte o está por emprender un viaje.
¿Qué hago si tengo stalkerware en mi dispositivo?
En el caso de Android, existe un servicio desarrollado por Google que permite saber si la cuenta vinculada con el celular está siendo accesada por dispositivos no reconocidos, un síntoma de que otros están accediendo a la información personal.
De cualquier modo el restablecimiento de fábrica del dispositivo, algunos lo llaman “reseteo duro”, borra por completo el sistema de almacenamiento del celular y lo reemplaza con el sistema operativo del dispositivo al momento de salir de la fábrica, lo cual elimina cualquier agente malicioso residente en el celular.
