¡Gracias por todo, Katherine Johnson!
Con reglas de cálculo, lápices y una mente brillante, la científica de la NASA luchó por la igualdad y logró llevar a la humanidad a la Luna. Pasó de ser un ‘talento oculto’ a una luz para las mujeres dentro del mundo de la ciencias
José Pablo EspíndolaDe niña, Katherine Johnson contaba todo. Platos, vasos, cubiertos y pasos, cualquier cosa que pudiera contar. Su amor por los números la convirtió en la mujer que ayudó a poner a los humanos en la Luna, ya que sus cálculos resultaron críticos para los primeros éxitos en los viajes espaciales.
Johnson, una heroína de la NASA, murió ayer a los 101 años. “La familia de la NASA nunca olvidará el coraje de Katherine Johnson y los hitos que no podríamos haber alcanzado sin ella. Su historia y su gracia continúan inspirando al mundo”, compartió Jim Bridenstine, administrador de la agencia espacial estadounidense.
Con reglas de cálculo, lápices y una mente brillante, Katherine luchó por la igualdad. Superó los obstáculos para lograr grandes cosas y mejorar la vida de las minorías. Pasó de ser un “talento oculto” a una luz para las mujeres dentro del mundo de las ciencias.
“Ya no es una figura oculta, su valentía y compromiso con la excelencia deja un legado eterno para todos nosotros”, indicó la NASA.
Katherine calculó la trayectoria de Alan Shepard, el primer estadounidense en el espacio. John Glenn le pidió que revisara personalmente los cálculos realizados por las nuevas computadoras electrónicas antes de su vuelo a bordo de Friendship 7, la misión en la que se convirtió en el primer estadounidense en orbitar la Tierra.
“Si ella dice que son buenos, entonces estoy listo para partir”, dijo el astronauta John Glenn, cuando Johnson verificó a mano los números de la trayectoria de la misión.
Johnson también ayudó a sincronizar el Módulo Lunar del Proyecto Apolo, trabajó en el Transbordador espacial y el Satélite de Tecnología de Recursos de la Tierra y fue autora de 26 informes de investigación. Se retiró en 1986, después de 33 años.
A lo largo de su vida, la matemática consiguió ganar múltiples galardones; sin embargo, el martes 24 de noviembre de 2015 obtuvo el mayor de ellos, el premio civil más alto que otorgan los Estados Unidos, la Medalla Presidencial de la Libertad, de manos del presidente Barack Obama.
“Después de toda una vida de alcanzar las estrellas, hoy, Katherine Johnson aterrizó entre ellas. Pasó décadas como una figura oculta, rompiendo barreras detrás de escena. Pero al final de su vida, se había convertido en un héroe para millones, incluidos Michelle y yo”, escribió Obama para despedir a la matemática.