Una de las cosas que nos permiten los Juegos Olímpicos es conocer la cultura y costumbres del país donde se llevan a cabo, y la música es un tema que no pasa desapercibido en los eventos deportivos.
Así como en los mundiales de futbol o en el Superbowl la música es una parte muy importante e icónica, en los Juegos Olímpicos también lo es. Y la melodía que se ha ganado el corazón de los miles de asistentes a Río es el “Baile de favela”, que si bien no es la versión original, pues está “suavizada” y se le ha quitado la mayor parte de la letra por su alto contenido sexual, sigue causando furor entre los visitantes.
Es un sonido funck, casi en vías de extinción, que tiene toda su historia en las favelas de Río y que según expertos, el género representa a “lo excluido, de lo excluido”.
Cabe destacar que “Baile de favela” no proviene de un gran compositor o un cantante de renombre, sino que fue compuesto por un joven brasileño de origen humilde.
El baile de favela
El funk brasileño es distinto al estadounidense. Está inspirado más en el hip-hop Miami bass y tiene una historia muy ligada a las favelas de Río, donde se hizo popular de forma asombrosa en décadas pasadas.
Las favelas son los sitios más pobres de Brasil, conocidas mundialmente por su alto grado de violencia donde, incluso en algunas, ni las autoridades entran, pues son lugares donde la única ley es la de los capos de droga.
Sin embargo su música, el funk, fue prohibido, pero en 2009 se reconoció como un “movimiento cultural” popular.
En peligro de extinción
Para el antropólogo Hermano Vianna, es un género que representa “el excluido del excluido”.
A menudo sus letras causaron polémicas por hacer referencias explícitas al sexo o las drogas.
En varias favelas de Río los bailes funk fueron prohibidos o limitados en los últimos años con la instalación de unidades policiales, que arrebataron el control territorial a bandas de narcos.
Los expertos creen que el hecho de que la música funk que suena en Río 2016 provenga de São Paulo es sintomático de la situación que vive hoy ese género.
“En Río de Janeiro los bailes funk están bajo amenaza y en São Paulo se vive una escena contraria, de expansión de los bailes”, señala Facina, profesora de la Universidad Federal de Río de Janeiro.
Género de exclusión
Algunos ven como una paradoja que en las arenas olímpicas, donde predominan espectadores de clase media y alta, suene una música que valoriza a favelas que miran los juegos a la distancia.
“Las comunidades hoy en día están olvidadas: sin cultura, sin saneamiento básico, sin infraestructura, sin nada. La Olimpiada es para los ricos”, sostiene Fabiano Fagundes, el DJ Byano que desde hace 18 años pone la música en el baile funk de la favela de Chatuba, uno de los más auténticos de Río.
“El funk es una cultura discriminada e incluso así está creciendo cada vez más”, dice DJ Byano a BBC Mundo. “Esto es un paso hacia la victoria”.
La canción ha sonado además en el entrenamiento argentino de voleibol de playa y ha sido adaptada por hinchas brasileños en las tribunas del estadio montado en Copacabana o en la Arena Olímpica durante pruebas de gimnasia.
• Otro tema de las Olimpiadas fue “Rap de la felicidad: Sólo quiero ser feliz y andar tranquilamente en la favela donde nací”.
• En la actualidad el funk también se escucha en los barrios más acomodados y en discotecas caras de Brasil.