Kate Spade y el sentido de humor en sus diseños

La noticia de la muerte de la diseñadora Kate Spade cimbró al mundo de la moda. Autoridades de Nueva York confirmaron que la mujer, de 55 años, fue encontrada sin vida en su casa de Manhattan.

El misterio rodea, hasta el momento, su muerte pero medios locales ya hablan de que se pudo tratar de un suicidio.

La alegría de Sade se reflejaba en sus obras, la mayoría coloridas, y en sus productos que abarcaban no sólo ropa sino vistosos bolsos, pijamas y hasta fundas para el celular.

Apenas el año pasado, la diseñadora volteó a México y convirtió a Frida Kahlo en su musa, creando ropa colorida con estampados de flores, colibríes, cactus, lentejuelas, entre otros elementos propios de México.

Ropa y accesorios, creados por Spade, fueron los preferidos de iconos de la moda como Kate y Pippa Middleton, Sarah Jessica Parker, Leighton Meester, entre otras.

Pocos saben que Spade era periodista y que su sueño, que logró, era el de acabar con los bolsos aburridos y clásicos creando sus ya populares diseños llenos de color, lazos, estampados de lunares, con su nombre en cada uno de ellos.

Entre las cualidades de sus diseños están la alegría que el color y los estampados, sin miedo a llamar la atención, dotan a sus accesorios y prendas. Dicen los expertos que más allá de hacer concesiones a las tendencias, las creaba.

En 2006 la diseñadora vendió su firma a Coach, por 2.200 millones de euros, y en 2008 lanzó una nueva tienda, llamada Frances Valentine, en honor a su hija, en la que siguió diseñando accesorios coloridos y divertidos como sus estridentes monederos multicolores.