En las elecciones presidenciales de Uganda en 2011, periodistas, activistas y ciudadanos en general se dieron cuenta de que cierto tipo de mensajes SMS no llegaban a su destino.
Aquellos SMS que incluían palabras como “dictador”, “Egipto”, “Mubarak”, “policía”, “balas”, “Ben Ali”, “poder de la gente”, entre otras, simplemente no llegaban.
África es un continente que depende del uso del celular, pero no estamos hablando de smartphones, sino del primer Nokia que tuviste en tus manos y que solo te permitía enviar mensajes de texto. A base del SMS, los africanos pagan servicios, reciben resultados deportivos y ordenan comida, entre otras cosas.
El Banco Mundial pronostica que la penetración de estos celulares llegará al 80 por ciento de la población en todo el continente para marzo de este año.
Pero ante la amenaza de gobiernos represores, como es el caso de Siria, Egipto, Uganda y Libia, la comunicación no está garantizada. Menos si se trata de mensajes que interfieran con los intereses del régimen.
En el caso extremo de que un gobierno bloquee el acceso a la red de telecomunicaciones, Abiyama ofrece una alternativa menos riesgosa para periodistas, activistas y rebeldes que quieran compartir información.
Open SIM Kit es una guía que ayuda a transformar a los celulares en una especie de e-readers a través de las tarjetas SIM. En lugar de mandar SMS que se puedan interceptar, quienes opten por esta vía podrán pasar de “mano en mano” tarjetas SIM con información.
Aunque arcaica, la idea podría ser la manera más segura de pasar información en países que viven una represión extrema, como Siria.
Abiyama ganó recientemente el Knight News Challenge: Mobile, una competencia organizada por la Knight Foundation que apoya con fondos millonarios a las mejores ideas en tecnología móvil.