Después de que CNN revelara que Morgan Freeman tuvo conductas inapropiadas con mujeres, el actor pidió disculpas a quienes resultaran afectadas por sus palabras, pero si dejó en claro que él no es un depredador sexual, lo cual inició una pelea de declaraciones entre la empresa de comunicación y los abogados del afroamericano.
La tensión se crecenta, ya que desde que el litigante Robert Schwartz pidió a CNN que se retractaran de su reportaje por que están dañando la reputación del actor, la compañía de noticias dice no tener miedo de ir a la corte y sostienen la posición inamovible de su exclusiva.
El vicepresidente legal de CNN, David Vigilante, dijo que la carta original que exigía una retractación fue “diseñada para el consumo de la prensa, está plagada de especulaciones vacías, retórica sobrecalentada y, en algunos casos, afirmaciones claramente falsas”.
También añadió que “Las protestas sobrecalentadas en su carta no arrojan ninguna sombra sobre el gravamen central de la historia de CNN: que Morgan Freeman se involucró en un patrón de comportamiento que degradaba y sexualizaba a las mujeres, independientemente de que estuvieran o no a su servicio”.
Pero Schawartz no se quedó de brazos cruzados y respondió a este comentario a través del medio The Hollywood Reporter.
“‘La carta de CNN es larga en agitación de sables, pero corta en sustancia (…) No aborda la convincente evidencia que proporcionamos de que la historia se vio empañada por la manipulación de los hechos y el conflicto de intereses. Fue defectuosa desde el principio y aún lo es. Basta ya”, refirió el abogado.
Freeman se retractó el 25 de mayo de acciones que pudieron haber herido susceptibilidades en ambientes laborales con mujeres, pero también afirmó “No creé entornos de trabajo inseguros. No ataqué a las mujeres. No ofrecí empleo o ascenso a cambio de sexo. Cualquier sugerencia de que lo hice es completamente falsa “.
