Benjamin Wynn, mejor conocido en el mundo de la música como “Deru”, presenta su nuevo álbum titulado “1979”. Esta producción no es como cualquier otra. Más que música, es una caja de sorpresas.
Es fácil perderse entre tantos músicos y música parecida que flota por Internet. Los grupos más recientes suelen tener sonidos similares, y cuando se trata de comparar, es difícil llegar a una conclusión de ¿quién está pensando diferente? ¿Quién esta experimentando? ¿Quién se va atrever a hacer algo nuevo?
Tras no querer perderse en la marea de música que flota por la Red, y después de inspirarse en varias memorias de su vida, Deru quiso enfocarse en algo material, que sus fans pudieran sentir, ver, escuchar y sobretodo vivir. No estamos hablando de un DVD ni un CD interactivo, si no de algo más emotivo y menos efímero.
Si no es DVD, CD, o .mov, entonces, ¿qué es? Deru se salió de su comfort zone y creó para su álbum, un proyector compacto que incluye las nueve canciones del álbum “1979”, acompañadas de nueve cortometrajes hechos por el video artista Anthony Ciannamea.
En esta era donde todos pueden ser músicos, todos pueden ser sus propios productores, disqueras y todos pueden componer sus propias canciones, es más complicado salir a la superficie con algo innovador para los amantes de la música.
A esta caja de sorpresas Deru le llama “The observe box”, y es un proyector pico, envuelto en un diseño especial de madera que hace que este álbum único tenga su propio mo-jo.
“The observe box” esta basada en la colección encontrada de artículos, fotos y otras memorias que dejo atrás el filosofo Jackson Sonnanfeld-Arden.
“Para mi, este proyector es una manera de extender mi álbum en el espacio físico y único de cada persona que compre el álbum. Lo padre del proyector, es que cambia drásticamente como se vive la experiencia dependiendo de donde estés proyectando y escuchando la música. Puedes experimentar y vivir otra experiencia con distintas texturas. También tengo la idea de que este proyector es como una cápsula del tiempo moderna, y que las memorias pueden vivir con luz. Así como cuando sacamos memorias de nuestro cerebro, y las revivimos”, dijo en entrevista para Reporte Indigo.
Cuando le preguntamos sobre qué lo inspiró a crear “1979”, Deru comentó que varias cosas que pasaron en el momento en el que estaba trabajando en ese álbum, “algunos eventos me hicieron recordar mi niñez junto con este descubrimiento del viejo artefacto que encontré en un tianguis de Glendale, California, me dio la idea de que tenia que combinar la música que quería escribir, con algún tipo de capsula del tiempo que pudieras cargar en tu mano”.
Y agregó: “Después de hacer una investigación extensa de esta caja que había encontrado en el tianguis, me tope con las filosofías de Jackson Sonnanfeld-Arden. Y mientras yo empezaba a grabar el álbum “1979” a un casete, la nostalgia y calidad del casete iba de la mano con las palabras de él”.
Deru trabajó aproximadamente dos años en la elaboración de “1979”. Desde seis meses de investigación, llamadas a extraños, intercambio de e-mails con compañías reconocidas, y en general hablando con todas las personas que ayudarían a ver si era factible este proyecto. Después, otro año más trabajando con la fabrica que lo ayudó a convertir esta idea en realidad.
Y al cuestionarle si la gente va a vivir una experiencia distinta escuchando su música con el proyector, contestó: “Definitivamente. Lo que me encanta de lanzar un álbum ambient en un proyector de video, es que las características en los proyectores son perfectas para poner al que escucha el álbum en un ambiente ideal para sentir la música. En otras palabras, si el que escucha baja la intensidad de la luz del espacio en donde este, puede entrar en otra mentalidad para así escuchar y vivir la experiencia a su manera. Parte de la diversión de este proyector es experimentar como diriges la luz de esta caja. La puedes apuntar a distintos tipos de vidrio, telas, espejos etc y así cambiar tu experiencia cada vez”.
“No hay duda en mi mente que la memoria es nuestro más grande regalo de vida. Nuestras memorias nos dan acceso al tiempo, a la identidad y los sueños. He explorado memorias a través de historias y canciones, documentándolas para así poder compartirlas más a fondo. ‘1979’ es una celebración de la memoria en su naturaleza compartida”, finalizó.