La farsa del Estado ante los pueblos originarios
Kalu Tatyisavi, Premio Bellas Artes de Literatura en Lenguas Indígenas 2019, asegura que los indígenas no necesitan de propaganda política para impulsar su cultura, sino de autonomía para rescatar su legado
Fernanda MuñozLos pueblos originarios son una parte esencial de la cultura, y es tal su importancia ante la sociedad que a lo largo de los años algunos funcionarios gubernamentales han intentado enaltecer su papel en la historia del país; sin embargo, no todos están convencidos de eso, como el filósofo y sociólogo Kalu Tatyisavi, Premio Bellas Artes de Literatura en Lenguas Indígenas 2019.
Uno de los gobiernos mexicanos que más han remarcado su apoyo hacia las comunidades originarias es el actual, ya que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha asegurado que estos grupos serán la prioridad de toda su administración.
“Vamos a escuchar y a respetar a todos, pero le vamos a dar preferencia a la gente humilde; de todos los pobres, la preferencia la van a tener los pueblos originarios, eso ya se definió”, sostuvo López Obrador a finales de 2018.
Pero a pesar de las palabras del izquierdista, Kalu Tatyisavi, hablante de la lengua Tu´un Savi, que desde el náhuatl es mixteco, comparte que la ayuda del Estado en vez de apoyar a las comunidades les impide desarrollar la autonomía que necesitan para obtener un ascenso social y cultural propio.
“Yo impulso a las comunidades desde muchos campos, desde la enseñanza doy clases a los maestros, a originarios, pero sobre todo me interesa la parte de la autonomía, la cual ninguna comunidad tiene, es decir, tomar decisiones políticas, económicas y culturales por sí mismas, eso no se ha hecho desde la Colonia hasta la fecha”, dice Kalu.
En entrevista con Reporte Índigo, el también profesor del Centro Cultural José Martí agrega que ni la celebración de una fecha, como el Año Internacional de las Lenguas Indígenas, representado por diferentes organismos e instituciones nacionales e internacionales, ayuda al desarrollo de los pueblos nativos.
Para el originario de Oaxaca, si el Estado es el que busca darle la autonomía que requieren las comunidades a través de festividades, en realidad hará todo lo contrario, pues el único resultado que se consigue así, es pura propaganda.
“Los festejos oficiales no repercuten a nivel comunitario a que la lengua aflore, a que sigan su camino de revitalización o sobrevivencia, simplemente son festejos que a alguna gente le interesa vender para comprender el patriarcado”, comenta Tatyisavi.
En el gobierno actual, una de las actividades más sobresalientes fue el acto de confianza que algunos representantes originarios le depositaron al jefe de Estado a inicios de su gobierno, pidiéndole que los protegiera ante cualquier situación.
Para el escritor, los originarios que le piden ayuda al gobierno necesitan autoreflexionar sobre sí mismos
Al respecto, Kalu Tatyisavi explica que las comunidades que tienen contacto cercano con el gobierno no han autoreflexionado sobre sí mismas y la importancia que representan, debido a que están muy colonizadas. “Lo único que hacen es extender la mano a quien piensan que les puede ayudar a resolver un problema, pero el gobierno no los ayudará a fondo, ellos deben comenzar por sí mismos”.
Tener una autonomía implicaría, entonces, una descolonización, además de una reflexión por parte de las comunidades, que se sientan orgullosas al decir, según el sociólogo, ‘yo saludo en mi lengua, hablo en mi lengua y con eso estoy construyendo una historia, una economía y una política nueva’.
Impulso a los pueblos originarios desde la escritura
Cuando Kalu Tatyisavi estudió Filosofía y Sociología comprendió de mejor manera la gran crisis social, política y económica en la que estaban envueltos los pueblos indígenas en México. Y pensando cómo podía ayudar, encontró en las letras una herramienta para defenderlas y enaltecerlas.
En Tyi niin iyo (Porque en silencio), libro que lo llevó a ser ganador del Premio Bellas Artes de Literatura en Lenguas Indígenas 2019, busca explicar la profundidad de la crisis social que atraviesan las comunidades originarias.
El libro está dividido en cuatro partes, en la primera se da una exploración oral desde la lengua misma; en la segunda, un solo poema generaliza la importancia de las lenguas originarias; en la tercera, Tatyisavi explica la crueldad de la inquisición, y finalmente en la cuarta parte aparece otro poema; todo escrito en su lengua originaria.
De acuerdo con el autor, con la ayuda del arte y de cualquier otro campo académico, se debe buscar la profundidad de un problema, así como la crítica, pues si no se hace de se modo se estará repitiendo una historia implementada por otros, una realidad colonial que, desde su punto de vista, existe en la actualidad.
“Los pueblos originarios tendrían que estar representadas por jóvenes, por gente grande y, por supuesto, necesariamente por mujeres, aunque lamentablemente este género está mucho más subordinado, prohibiéndole que tenga una visión plural de la realidad”, resalta Tatyisavi.