La poesía de un ‘insulto’ para impulsar a las mujeres

Con su más reciente libro titulado Perras, la poeta Zel Cabrera busca que las mujeres víctimas de violencia no tomen el nombre de su publicación como una agresión sino como un halago que las impulse a defenderse ante cualquier circunstancia. Además, pide que las autoridades no se conformen con las leyes en papel y realmente tomen acciones con respecto a los agresores
Fernanda Muñoz Fernanda Muñoz Publicado el
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En México, 9 mujeres son asesinadas a diario, un escenario poco alentador para la población mundial y aún más para los familiares y amigos de las víctimas, personas que, en ocasiones, no encuentran una palabra de aliento ante el dolor y la rabia de su sentir.

Sin embargo, la literatura y la poesía ocasionalmente funcionan como un hombro de apoyo a través de un libro, un objeto que, aunque es material, enriquece la mente y la esencia herida de quien lo abre y lee las palabras ahí escritas.

“Describirte es mi venganza / Eres tú, convencional y desesperada / Desde acá te hablo / desde acá te deseo un destino incurable y triste / Y quiero que lo sepas: a mí vienen a curarme las palabras / A ti no te curará ni Dios”, se lee en el poema Carta a una oficinista, que integra el más reciente libro de Zel Cabrera, Perras (FCE, Tierra Adentro).

Esta publicación, de acuerdo con su propia autora, nació de la necesidad de hacer un proyecto escandaloso en el que las mujeres tuvieran el papel principal en un mundo que aún no las valora como debería.

Según destaca, tomó como inspiración los temas que, al parecer, están en el aire porque aún nadie se anima a aclararlos, como el feminicidio, el feminismo o la menstruación, entre otros tópicos

“Fue difícil aterrizar estos temas a la poesía, porque de pronto está el riesgo de caer en un lugar común, el peligro con el que todos los poetas nos encontramos a la hora de escribir. Pero no sólo eso, también tenía que manejar el dolor de asuntos tan frescos y difíciles como lo es la violencia hacia la mujer”, comenta la también Premio Nacional de Poesía Tijuana 2018.

Y aunque Cabrera se enfrentó al dolor, fue este sentimiento el que la impulsó a seguir adelante, a terminar un libro que, asegura, puede ser un gran soporte para aquellas mujeres que aún guardan silencio ante una situación de violencia, pero también a quienes salen diariamente a las calles a exigir igualdad.

Tanto a una como a otra les diría que estoy con ellas, en el silencio y en el grito (…) En el ‘no pasa nada, cuando estés lista aquí voy a estar’. Creo que Perras es un libro que también puede ser fiel y paciente, todos estos atributos que pudiera tener una perra, literal
Zel CabreraEscritora y poeta

En entrevista con Reporte Índigo, la escrita distingue que aunque las noticias diarias sobre violencia de género son, en parte, inspiración para escribir y exigir justicia, fue su mascota la que, en lo personal, la hizo darse cuenta que las mujeres pueden defenderse a sí mismas, independientemente de la situación.

Detalla que cuando decidió llevar a una pequeña perra a su casa, el miedo no escapó de su mente, pues su mascota mayor podría agredirla. Al paso de los días, y de un cuidado constante, decidió soltarla para que aprendiera a convivir con su semejante. Y aunque el perro mayor quiso abusar de ella como actividad natural, la pequeña mascota le lanzó un ladrido, defendiendo su cuerpo, su territorio.

“La intención de la palabra ‘perra’, que en toda el habla hispanoamericana se refiere a un insulto, es darle la vuelta, usarla como un distintivo, un halago, dejar de pensar que ser perra está mal, que estas conductas que tienen los animales no son las adecuadas, como defenderse y alzar la voz a algo que no queremos”, dice Cabrera.

‘El sistema imperante que calla a las mujeres se va a defender’

En el país, las marchas a favor de los derechos de las mujeres son cada vez más constantes, han ocasionado que las autoridades correspondientes no dejen de prestar atención a las denuncias contra aquellos hombres violentos hacia el sexo femenino. Pero no es suficiente.

De acuerdo con la autora de Una jacaranda en medio del patio (Exlibris, 2018), ese sistema dominante al que se le calló una vez puede volver a resurgir y pedir lo que, por décadas, fue suyo.

“Todos estos movimientos a favor del feminismo, así como despertaron a muchas mujeres, también despertaron muchas cosas negativas y lo estamos viendo. Porque el sistema imperante se va a defender y va a reclamar la continuidad de sus privilegios que hasta la fecha tiene”, comparte la autora.

En ese sentido, declara que sería bueno que las autoridades no se confíen de algunas medidas ya implementadas y actúen de verdad, en favor del bienestar femenino, que las promesas no se queden solamente en un papel sino en la práctica.

“Necesitamos que no nada más se diga ‘esa es la regla’, porque de pronto parece que ya ganamos la guerra, pero el agresor sigue saliendo bajo fianza y a la hora de denunciar nada nos garantiza que la petición será ejecutada”, reclama Cabrera.

Puntos de venta

Próximamente, Perras se encontrará disponible en todas las librerías del Foro de Cultura Económica (FCE). Por lo pronto, está a la venta en las estanterías de Educal.

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