‘La política es el reino de la mentira’
El escritor Álvaro Uribe critica a los contendientes presidenciales haciendo énfasis en que solo buscan el voto para sus fines y no por el bien común del país y haciendo de la demagogia el arte de su engaño con la sociedad mexicana
Hidalgo Neira[kaltura-widget uiconfid=”38045831″ entryid=”0_j9ai30q5″ responsive=”true” hoveringControls=”true” width=”100%” height=”75%” /] Máscaras, la proyección del otro que vive en nuestro interior, el fingir ante la sociedad, ser alguien más, la persona que se ve al espejo y que esconde en la mirada a su verdadero yo.
La sinceridad para los griegos era precisamente eso, despojarse de la careta después de estar en el teatro, sin cera, sin filtro, sin ocultación. Decir la verdad.
Ante estas premisas es que Álvaro Uribe se evocó a lo largo de dos años para escribir “Caracteres”, un libro en el que explora distintas personalidades y facetas de las maneras de ser del humano, posturas que adopta, ya sea por necesidad, necedad o sentido de sobrevivencia ante la convulsa sociedad.
De estas apariencias, Uribe se pronuncia con dureza sobre los políticos que pretenden ocupar la silla presidencial en 2018, afirmando que este es un juego donde sobreviven las falacias.
“La política es el reino de la mentira, no es el reino de la verdad, los políticos quieren convencerte de que votes por ellos, no quieren ninguna otra cosa. En términos ideales lo que quiere un político es el bien común y el bien común supone compartir una verdad que sea también colectiva”, explica el también ensayista en entrevista.
De cómo se perfilan los contendientes presidenciales para las urnas, Uribe dice que sus máscara son totalmente contradictorias, sin poder dar una confianza a la ciudadanía mexicana.
“Caracteres” se publica bajo el sello Alfaguara y en el libro Álvaro Uribe describe a 50 arquetipos, los cuales de alguna u otra manera siempre hemos tenido presentes en nuestro imaginario cultural, ya sea un borracho, un uniformado, un crítico, una portera y más.
El más mentiroso
Definir qué político es el que es menos sincero consigo mismo y con la gente, es un debate que resulta difícil para Uribe, ya que son contradictorios con sus propuestas y lo que realmente buscan en su candidatura.
“No hay nadie para mi distinto que valga la pena, no hay nadie que no esté mintiendo y que no esté engañando, igual en el mejor de los casos, me gustaría pensar que se engañan a sí mismos, que quizá los mejores de ellos no es solo que nos engañan a nosotros, sino que de veras piensan que van a salvar a la patria”, comenta.
Enumerarlos de quién puede ser el más mentiroso de todos, es una labor que no tiene ni cabo ni rabo para el ensayista, critica a todos y no se queda con ninguno a favor.
“El que se presenta como menos mentiroso y el más moral, que es López Obrador, es el que yo estoy queriendo suponer –y eso por darle el beneficio de la duda– de que se engaña a sí mismo, porque yo fuera de eso lo veo como un político como los demás, lo que quiere es ganar. La prueba es la constitución moral y la alianza con el PES, él se decía que era un hombre de principios, pues los estoy buscando debajo de cada declaración”, explica.
“Yo ya no veo la diferencia entre ser simpatizante y ser priista, el hombre (Meade) está hundido en el PRI, es triste que por otro lado parecería que es atractivo porque él no ha robado, pero también es absurdo pensar, como si fuera una gran virtud, ¡esa es una obligación, no una virtud! (…) y bueno del otro (Anaya) ni hablar, su atractivo es que es joven ¿y luego? Casi cualquiera que nos gobierne va a ser un desastre y eso es lo más triste”, concluye.
Millennials: ¿los narcisos actuales?
Pareciera que los millennials son egoístas, egocentristas y narcisos por naturaleza, pero Uribe adjudica que esta condición es propia de cualquier joven, sea de la generación que sea.
También apunta cómo es que se abusa del uso de la tecnología, a un punto en el que resulta un problema por cómo se encuentran embebidos en el uso exacerbado del celular
“Es sorprendentísimo que no se puedan liberar ni durante dos horas en una comida y uno dice ‘¿es que no puedes dejarlo? Es un aparato, no pasa nada, además ahí te esperan tus whatsapps, o vete al baño y échate unos tres whatsapps si ya no puedes y te da temblorina y luego regresas’ como si fuera el cigarro”, ironiza.
Hablar con la mejor cara
Si hoy no es un buen día, si se siente que el mundo cae encima de los hombros, si realmente ya no se puede seguir adelante, Álvaro Uribe sugiere que hay que dejar el malestar en el interior y enfrentar a la sociedad con un rostro que aparente mejoría.
“Casi de lo más sano que tienen nuestras máscaras es esa, existe el dicho de darle al otro siempre tu mejor cara, no está mal, salir a dar tu peor cara pues que desagradable (…) igual una mentira piadosa es más moral que la verdad, porque la verdad, considerada como valor absoluto o sea ‘te voy a decir la verdad’ piense lo que piense alguien haría imposible la convivencia, inclusive hasta contigo mismo”.