Levanten la mano los maestros

A los maestros y su docencia les debemos enseñanza, experiencia y aprendizaje. Y la educación es una de las herramientas para la prosperidad social y económica de una nación.

Por ello, en el Día Mundial de los Docentes, se celebra a todo aquel que ha entregado lo mejor de sí para formar a quienes tienen el futuro de los países en sus manos.

Desde 1994, hoy se conmemora esta fecha proclamada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), la cual insta a valorar la docencia y mejorar su situación profesional.

Sobre todo si se toma en cuenta que el Instituto de Estadística de la UNESCO calcula que se requieren alrededor de 70 millones de nuevos maestros para cumplir con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 (ODS 4), “cuyo fin es garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad, así como fomentar las oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida para todos”.

La Unesco señala que en los diferentes países, se deberá contratar en los próximos 14 años a dicha cantidad de docentes para proporcionar a todos los niños una educación primaria y secundaria.

“De 24.4 millones de docentes necesarios para alcanzar la educación primaria universal (EPU), 21 millones deberán reemplazar a los que dejarán de ejercer. Los 3.4 millones restantes serán docentes adicionales, necesarios para expandir el acceso a la escuela y garantizar la calidad de la educación, con una reducción del número de alumnos por aula, que no deberá superar los 40”, dice un reporte de la Unesco.

Y es que la educación es un reto a nivel mundial, pero también nacional, pues en la República Mexicana el sistema educativo contaba con 2 millones 64 mil 775 docentes para enseñar a más de 36 millones de estudiantes  (al cierre del ciclo escolar 2016-2017). Esto equivale a que por cada maestro mexicano hay casi 18 alumnos.

Otros problemas

Además de la falta de maestros 
(y un buen salario para ellos), México enfrenta el dilema de estar debajo de la media en educación, respecto al resto de naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE). Sólo hay dos de cada 10 adultos mayores a 25 años que cuentan con estudios universitarios, según el reporte “Panorama de la Educación 2017”.