¿Había que temer a la Gestapo? Sí, si tus ideas políticas eran disidentes a las del Führer. ¿Había que temer a los soldados alemanes? Sí, si eras judío; pero, había que temer más a los Camisas pardas, aquel grupo militar que surgió a la par del ascenso de Hitler al poder.
Un cuerpo violento que tomó su nombre por portar el uniforme del Ejército alemán de la Primera Guerra Mundial. Los Camisas pardas tenían como lema “Sólo se puede acabar con el terror mediante el terror”.
Y es que esta organización (Sturmabteilung) perseguía a comunistas, rebeldes, judíos, religiosos y homosexuales a cuchillo y espada. ¿Su gran contradicción? Su líder y varios de sus integrantes eran abiertamente homosexuales.
Ernst Röhm, más que un amigo íntimo de Hitler, comandó a los Camisas pardas (SA) durante cuatro años tras haber vivido un tiempo en Bolivia. A su regreso, en 1931, reclutó a millones de elementos, la mayoría de ellos jóvenes homosexuales con quienes algunos romances.
Röhm le había escrito una carta a su médico particular en la que confesaba su preferencia sexual:
“Me imaginaba ser homosexual, aunque sólo lo descubrí de verdad en 1924. Contraje tres contagios que más tarde consideré como un castigo de la naturaleza por mi comportamiento antinatural. Hoy todas las mujeres me causan horror, especialmente, las que me persiguen con su amor, que por desgracia no son pocas”, escribió el militar en 1929.
El historiador Martin John Gilbert comentaría que la homosexualidad de Röhm y de los Camisas pardas se manifestaría en su virilidad y en su adoración a la mascunilidad y la rudeza
Sin embargo, los Camisas pardas fueron disueltos cuatro años más tarde por el mismo Hitler, ya que el número de miembros de este cuerpo militar rebasó al del Ejército, lo que podía desencadenar un futuro golpe de estado.
Fue en la “Noche de los cuchillos largos” cuando Hitler ordenó la ejecución de su amigo Ernst Röhm por la presión que sus aliados políticos, quienes tenían la rebelión de los Camisas pardas y detestaban la homosexualidad de los mismos.
“El Führer estará más consternado cuando se entere que Hermann Göring es gordo y Joseph Goebbels cojo”, decía la gente al enterarse que Hitler desconocía que su amigo Röhm era homosexual
Y ahí es donde el escritor Lothar Machtan sostiene en su libro, “El secreto de Hitler”, que el líder era homosexual, por lo que la “Noche de los cuchillos largos” habría sido una operación para encubrir su preferencia sexual descubierta por Röhm.
Fue un 4 de noviembre, como hoy, que los Camisas pardas se crearon en 1920.
