María José no come carne ni otros productos de origen animal de s de hace seis años. Y aunque ahora se autodefine como alguien feliz porque se siente cómoda con su cuerpo, admite que le ha costado trabajo llegar hasta donde está: en un equilibrio interno y externo consigo misma.
“Me volví vegana porque cuando entré a la universidad fui más consciente de lo que me rodeaba, es decir, comencé a percatarme de que la naturaleza es muy valiosa y que no es justo que los seres humanos arruinemos eso, que matemos cruelmente a los animales con el fin de alimentarnos”, comenta María José a Reporte Índigo.
De acuerdo con la Revista Chilena de Nutrición, en su artículo “Ventajas y desventajas nutricionales de ser vegano o vegetariano”, una de las principales razones por las que una persona opta por este modo de alimentación es por los principios animalistas.
Al respecto, Edgar Núñez, chef del restaurante Sud 777 y Comedor Jacinta, comenta en entrevista que, aunque él no está ni en contra ni a favor del veganismo, reconoce que rechaza la manera en la que se puede llegar a producir la proteína animal, pues “ya no es como antes que cazabas para comer o tenías a tus animales para consumo personal (…) No sufrían como lo hacen ahora”.
Andrés Aguilar Àguila Loustaunau, chef ejecutivo y propietario del restaurante Vegan Inc., comenta que, incluso, la industrialización animal ha evitado que estas especies consigan generar vitaminas por su propia cuenta a través de una alimentación basada únicamente en plantas.
Estigma social
Uno de los retos que María José tuvo que afrontar después de decidir ser vegana fue la interacción con sus amigos y familia. Cada que planeaban salir a comer, debían verificar que el lugar tuviera opciones sin carne para ella y pudieran convivir todos por igual.
El chef Núñez comenta que aunque él no es vegano, respeta los gustos de sus comensales, por lo cual, también crea platillos sólo con vegetales.
“Al principio lo tomaban a broma, porque toda mi familia come carne y pensaban que yo lo estaba haciendo por moda. También me decían que era una mala decisión, porque creían que no me iba a alimentar lo suficientemente bien”, asegura la joven.
La Revista Chilena de Nutrición señala que, en general, este tipo de alimentación es rica en fibra dietética, magnesio, fotoquímicos, antioxidantes, vitaminas C y E, hierro no hemínico, ácido fólico y ácidos grasos poliinsaturados (n-6), pero baja en colesterol, grasa total, hierro, zinc, vitamina A, B12 y D, y en especial ácidos grasos omega 3, como EPA y DHA, por lo cual es necesario un suplemento.
María José cuenta que cuando le hizo saber a su familia que dejaría de comer carne y productos como leche, huevo y queso, su mamá le dijo que cuál era el siguiente paso que iba a tomar, si volverse judía o si tendría creencias musulmanas.
La salud es primero
México pertenece a las naciones con mayor obesidad en adultos en el mundo, esto de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en un registro que realizó en 2017. Y aunque algunas personas optan por balancear su alimentación debido a ello, otras eliminan de su vida algunos alimentos, como los veganos y vegetarianos.
En 2015, el reporte Obesity Update registró que más de la mitad de los adultos y casi uno de cada seis niños padecen sobrepeso en países de la OCDE. Las zonas con mayor prevalencia son: Estados Unidos, con 38.2 por ciento; México, con 32.4 y Nueva Zelanda, con 30.7.
El chef Aguilar Loustaunau, de Vegan Inc., nació en Sonora, uno de los sitios en donde más se consume carne en México, y también vivió en Monterrey, un lugar con la misma característica.
Cuando Aguilar fue a estudiar a Estados Unidos, la información le arrojaba que todas las enfermedades se podían curar a través de la alimentación basada en plantas. Él tenía sobrepeso, porque consumía mucha comida chatarra, pero desde que decidió hacer el cambio, comenzó a percibir más energía y bajó de peso.
Arlene Ricalde, licenciada en Nutrición y expresidente de la Asociación Mexicana de Nutriología, afirma que lo más importante cuenta se decide no comer carne, es acudir con un especialista para hacer un cambio correcto de alimentación, pues “en ocasiones un veganismo mal llevado puede producir mayor obesidad que una dieta normal que sí incluya diversos productos de origen animal”.
“Acudan con un nutriólogo que pueda desarrollar e individualizar su alimentación vegana, a corde a sus características, para no incurrir ni en deficiencias ni en excesos”, agrega Ricalde.