Los Premios Ariel entre festejos y protestas
Mientras que ‘Sueño en otro idioma’ ganó el premio a mejor película, la alfombra roja estuvo llena de manifestaciones contra el acoso y la violencia
Hidalgo Neira[kaltura-widget uiconfid=”38045831″ entryid=”0_cf43tezs” responsive=”true” hoveringControls=”true” width=”100%” height=”75%” /] En la noche de la sexagésima entrega de los premios de la AMACC, el largometraje “Sueño en otro idioma” se coronó con el Ariel a Mejor Película, el cual fue dirigido por Ernesto Contreras y refleja la historia de dos hombre indígenas que dejaron de hablarse a causa de una mujer en la selva veracruzana.
Amat Escalante vuelve a ganar el Ariel por Mejor Dirección, ya que en 2014 se hizo acreedor de la presea por su largometraje “Heli”, ahora con “La región salvaje” película de ciencia ficción que logró cinco premiaciones.
El Mejor Largometraje Documental cayó en las manos de Everardo González por “La libertad del diablo”siendo este el cuarto en su trayectoria profesional, en su testimonial el director denuncia la violencia vivida en México debido al crimen organizado.
El cineasta Diego Ros se llevó el galardón a Mejor Opera Prima con su cinta “El vigilante”, la cual tuvo su premiere internacional en el Festival Internacional de Cine de Morelia en 2016 y fue reconocida con el Premio Ficción Mundial en Los Ángeles.
Carlos Contreras se hizo acreedor del Ariel a Guión Original por “Sueño en otro idioma”, dejando atrás a libretistas de las cintas “La región salvaje”, “La libertad del diablo”, “Tiempo compartido” y “Vuelven”.
El consagrado actor Eligio Meléndez de 67 años se llevó el Ariel a Mejor Actor por “Sue- ño en otro idioma”, en la terna se encontraban talentos como Daniel Giménez Cacho, Humberto Busto, Gabino Rodríguez y Leonardo Alonso.
El Ariel para Mejor Actriz fue para Karina Gidi por su participación en “Los adioses” filme que habla parte de la vida de la escritora Rosario Castellanos, que va en contra de una sociedad machista en la Ciudad de México en la década de 1950.
Entre protestas y simpatías políticas
En el marco de la 60 entrega de los premios Ariel, los ecos del acoso sexual en la industria cinematográfica y la violencia que vive México se hizo presente.
Para la actriz Arcelia Ramírez es necesario seguir alzando la voz y no callar los abusos de esta índole en México.
“El grito es ¡Basta! Hay que domesticarnos, hay que domesticar las bajas pasiones y los instintos y la violencia, porque no nos podemos estar comiendo los unos a los otros en todos los sentidos, todo lo que significa comerte al otro, es decir, faltarle al respeto, abusar de él, pendejearlo, miles de significados que puede tener esta palabra”, expresó Arcelia Ramírez, protagonista de “Las razones del corazón” (2011).
Con un botón en blanco y negro en el que se leía la leyenda “No son tres, somos todxs”, varios de los asistentes a la gala de premios hicieron protesta de los estudiantes de cine desaparecidos en Guadalajara, los principales portavoces de este movimiento fueron el director Sebastian Hofmann y la guionista Issa López, que además portaron una playera alusiva a los jóvenes.
Durante la premiación, varios de los asistentes mostraron su simpatía hacia las políticas culturales de Andrés Manuel López Obrador.
“Han ofendido tanto al pobre AMLO que yo voy a votar por él (…) creo que está mejor apoyado en sus consejeros”, expresó Toni Kuhn, cinefotógrafo que recibió el Ariel de Oro por su trayectoria, quien a pesar de ser suizo de nacimiento, tiene derecho al voto en México desde 1991.
El cineasta Sebastián Hofmann que dirigió “Tiempo compartido”, también refrendó su voto al morenista, indicando que él se ha manifestado cercano al arte y la cinematografía.
“Yo creo que es el gallo de todos los que estamos en cultura, hay propuestas, hay planes de legislar los tiempos de pantalla en los cines, se han acercado mucho a nosotros los de Morena, entonces sin duda yo creo que todos los que hacemos cultura o al menos en su gran mayoría estamos con Andrés Manuel”, indicó Hofmann.
