La poeta mexicana María Baranda asegura que después de la pandemia, el encierro y tanta muerte, es urgente volver a la poesía, porque así es posible conectar directamente con el pensamiento y el corazón.
“Aquel que no recibe cantos, juegos y poesía en la infancia está en problemas, digo que conecta de inmediato el pensamiento con la emoción, lo hace más abstracto y más rápido, por la capacidad de juego, por la metáfora, por la amplitud en el vocabulario, y si un poema te va a dar ese golpe en la extensión de tu conocimiento, entonces urge”, expresa.
Por eso, encabezará una serie de charlas sobre poesía como parte de un proyecto de divulgación desarrollado por la Fundación para las Letras Mexicanas, a través de la Casa Estudio Cien Años de Soledad.
El ciclo Poesía: Primeras Letras, que está dirigido a todo el público, pero, especialmente, a padres de familia, docentes, bibliotecarios y promotores de lectura, estará compuesto por seis charlas que tendrán lugar del sábado 7 de mayo al 11 de junio, de 11:00 a 14:00 horas.
A lo largo de las charlas se presentarán poemas escritos por autores y autoras de distintas épocas y procedencias, tanto de lengua española como de otros idiomas, en este caso traducidos.
Xavier Villaurrutia, Vicente Huidobro, Lêdo Ivo, Eliseo Diego, Seamus Heaney, Juan Rejano, Marcos Leibovich, Mirta Aguirre, Juana de Ibarbourou, Juan Ramón Jiménez, Gabriela Mistral, Federico García Loca, Lope de Vega y Juan Gelman, serán algunos de ellos.
“Construir lectores de poesía no es fácil, pero es una de las mejores maneras de soñar que la sociedad puede ser mejor, que se puede desacomodar el pensamiento, confrontar las ideas, sugerir nuevos cuestionamientos. Como decía Bachelard, el poeta es un soñador de refugios. Leer poesía, también, es un camino largo en el cual a menudo se pierde el rumbo. Son varios los testimonios de maestros o padres de familia que reclaman las dificultades del género”, opina Baranda.