Noodles: la nueva moneda
Es bien sabido que en las cárceles, los reos darían lo que fuera por un cigarro, incluso, el tabaco se convirtió en el tesoro más preciado y cotizado para los reos.
Sin embargo, en la actualidad hay otro tesoro que tiene embelesados a los presos en Estados Unidos: las sopas instantáneas (Ramen noodles).
María Alesandra PámanesEs bien sabido que en las cárceles, los reos darían lo que fuera por un cigarro, incluso, el tabaco se convirtió en el tesoro más preciado y cotizado para los reos.
Sin embargo, en la actualidad hay otro tesoro que tiene embelesados a los presos en Estados Unidos: las sopas instantáneas (Ramen noodles).
Este fenómeno se debe a la creciente crisis de alimentación que se vive en las prisiones norteamericanas, en las que el tabaco era la moneda de cambio más popular. Así lo determinó un estudio publicado por Michael Gibson-Light, quien forma parte de la escuela de sociología de la Universidad de Arizona.
De acuerdo a la investigación de Gibson-Light, la reducción de costes en las prisiones causó que disminuyera la calidad y cantidad de alimentos disponibles para los reos, por lo que las sopas ramen se volvieron lo más valioso para consumir dentro de esos lugares.
De hecho, los reos pasaron de consumir tres comidas al día a solamente dos comidas durante el fin de semana completo. Y para compensar la falta de alimentos y satisfacer el hambre, comenzaron a “traficar” con sopas ramen.
Michael Gibson-Light señala que las sopas ramen son fáciles de conseguir y son altas en calorías. Gran parte de los presos pasan sus días trabajando o haciendo ejercicio y no tienen suficiente energía para hacer estas cosas.
“A pesar de que estos fideos son de coste muy bajo, la crisis alimentaria hace que puedan ser intercambiados por casi todo”, agrega.
El diario británico The Guardian apunta que incluso algunos reos han confesado que se pelean por una sopa ramen.