Osos polares, cada vez más delgados por culpa del cambio climático
El calentamiento global provoca que la capa de hielo necesaria para que lo osos puedan cazar focas es cada vez más delgada, algo que no favorece a los mamíferos y los está condenando a desaparecer
Indigo StaffAlgunos osos polares están perdiendo peso durante la temporada en la que deberían de subirlo, según informó un nuevo estudio ambiental publicado el jueves 1 de febrero ¿Quién es el responsable de esta anomalía en el desarrollo de los mamíferos? Los científicos afirman que todo es culpa del cambio climático.
El adelgazamiento de la capa de hielo sobre el Océano Ártico que los osos necesitan para cazar focas durante la primavera es un efecto negativo del calentamiento global y esto produce modificaciones en la dieta de los osos.
Los investigadores estudiaron a las osas durante 10 días en abril, cuando se supone que deben comenzar a aumentar de peso para poder tener cachorros, alimentarlos y sobrevivir al duro invierno. Sin embargo, debido a que la capa de hielo está adelgazando, a los osos les cuesta más trabajo atrapar crías de focas incluso en la mejor época de caza, explicó Anthony Pagano, investigador del Servicio Geológico de Estados Unidos. El Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre enlista a los osos polares como especie en peligro de extinción.
Los osos polares cazan desde el hielo. Regularmente esperan a que las focas salgan para tomar aire y en otras ocasiones nadan tras de ellas. Si hay menos hielo marino o si se rompe fácilmente, los osos tienen que viajar más, regularmente nadando, y eso tiene consecuencias serias como un mayor gasto de energía, hipotermia e incluso riesgo de muerte, de acuerdo con Andrew Derocher, profesor de biología de la Universidad de Alberta y que no participó en el estudio.
Para su investigación, los científicos analizaron a nueve hembras de osos polares durante las últimas tres primaveras; le colocaron collares rastreadores que tenían cámaras de video. También se les monitorearon el peso y los niveles en la sangre.
Lo que encontraron los científicos fue que cinco de las osas bajaron de peso y cuatro de ellas perdieron entre 1.3 a 2.5 kilogramos por día. El peso promedio de las osas estudiadas fue de 175 kilogramos y una de ellas perdió 23 kilogramos en tan solo nueve días.
“Estamos hablando de una enorme cantidad de peso perdido”, dijo el biólogo de vida silvestre Anthony Pagano, quien es el principal autor del estudio publicado en la revista Science.