Durante la Revolución Mexicana, uno de los personajes que destacó por su liderazgo y sus habilidades militares fue José Doroteo Arango –Francisco Villa–, comandante de la División del Norte.
Son muchos los factores que hicieron trascender a Pancho Villa en la historia, aunque los calificativos que envuelven su figura tiran de dos polos: por un lado se hablaba del bandolero que robaba para ayudar a los más pobres; por el otro, del líder brutal , tiránico y mujeriego.
En 1914, Pancho Villa y su División de Norte encabezaron un asedio a Ojinaga. Durante los primeros días las cosas no iban bien, además de la pérdida de 130 efectivos de su equipo, las armas y las municiones se iban agotando.
Los villistas intentaban tomar la ciudad de Chihuahua, pero los recursos eran cortos.
Doroteo Arango ordenó a sus hombres que se acercaran a los camarógrafos que cubrían sus pasos. La propuesta era sencilla: Villa y su ejército darían alimento y transporte a aquellos que acompañaran a su batallón para que obtuvieran las mejores tomas de sus batallas.
Villa recibiría a cambio 20 por ciento de las ganancias del producto de la filmación para financiar su lucha.
Inicialmente la propuesta no funcionó, hasta que la Mutual Film Corporation –una compañía cinematográfica con estudios en Hollywood– se acercó al caudillo. Envió a un par de representantes para cerrar el trato en Ciudad Juárez.
“Las condiciones que acordaron eran un adelanto de 25 mil dólares y el 20 por ciento de los ingresos de taquilla a cambio de la exclusiva para filmar movimientos de tropas, batallas y operaciones militares de la División del Norte. Los villistas otorgaban cuatro salvoconductos para personas que asumieran los riesgos bajo su propia responsabilidad, además transporte y comida, pero nada de recibos de hoteles en México. Las cuatro personas se pondrían militarmente a las órdenes de Villa”, señala Paco Ignacio Taibo II en la biografía de Pancho Villa.
Gracias al trato se realizaron dos grabaciones: The Battle of Ojinaga y The Life of General Villa; Frank Thayer fue el productor de ambas.
The Life of General Villa se estrenó en 1914, era muda y se dividía en dos partes. En la primera se mostraba a Doroteo en acción; en la segunda, se hacía una recreación de sus primeros años como bandolero.
Sin embargo, la mayor parte de este metraje se perdió con el tiempo, sólo se conservan algunos fragmentos.
Dicen que hablaba bien el inglés, pero se sentía “muy puto”, según él, hablando así en medio de los ranchos y las balas. Un día como hoy pero de 1923 fue asesinado, en Parral, Pancho Villa. Te contamos algunas leyendas del Don Doroteo Arango https://t.co/zYdUBZxb5q
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) July 21, 2019