Este martes, Google presentó sus nuevos teléfonos inteligentes: el Pixel 3 y Pixel 3XL con la esperanza de que sus atributos y novedades tecnológicas los encumbren en el competido mercado de los dispositivos electrónicos.
Entre las novedades de sus dispositivos están las pantallas, que son más grandes, sus marcos más finos y sus dos cámaras delanteras.
El Pixel 3 tiene una pantalla de 5.5 pulgadas, mientras que la del XL es de 6.3, además pueden ser recargados de manera inalámbrica.
Los nuevos smartphones, los cuales cuentan con memoria de hasta 128 GB (no ampliables), buscan atraer mayor atención, a pesar de que las dos primeras generaciones hasta ahora apenas han hecho mella en el mercado.
Google ha vendido aproximadamente 7 millones de píxeles en los últimos dos años, en comparación, Apple, que ha vendido cerca de 388 millones de iPhones desde que salió el primer Pixel en octubre de 2016.
Google ha sido cauteloso en la distribución y comercialización del teléfono Pixel pues no quiere alejar a Samsung y otros fabricantes de dispositivos móviles que cuentan con Android en sus propios teléfonos.
Debido a que Android destaca los servicios de Google, es clave para el negocio vender anuncios a través de su motor de búsqueda y otras aplicaciones móviles.