Uno de los inventos que más le ha facilitado la vida a los seres humanos es, sin duda, el plástico. Pero así como nos ayuda a tener una vida más sencilla, también trae consecuencias ambientales que el planeta se encarga de cobrarnos día tras día.
Al ser un elemento que se elabora gracias al petróleo, el proceso de creación es altamente contaminante. Además, para elaborarlo es necesario gastar grandes cantidades de agua, un líquido necesario para la sobrevivencia humana y que comienza a escasear.
Por ejemplo, para fabricar una botella de que tenga capacidad de contener un litro, se requiere un 1.4 litros de agua, sin tomar en cuenta el contenido. ¿Cómo hacer para seguir utilizando un material como el plástico sin perjudicar tanto a la Tierra? En México hay una respuesta amigable con el ambiente.
Estudiantes de la Universidad Tecnológica de los Valles Centrales de Oaxaca diseñaron un polímero biodegradable que puede emplearse para elaborar bolsas o recubrimientos para alimentos.
POLÍMERO DE AVENA
En un comunicado, la agencia de Investigación y Desarrollo explicó que el material fue creado a partir de almidón de avena y compuestos antimicrobianos, los cuales pueden servir como barrera protectora contra la humedad, evitar la pérdida de compuestos volátiles y retardar la oxidación enzimática.
Este material, capaz de evitar el desarrollo de microorganismos como hongos y levaduras, fue desarrollado por las estudiantes de ingeniería en tecnología bioalimentaria, Esbeydhy Yescas y Karina Hernández.
La película es cien por ciento biodegradable; además, si te la comes al día siguiente la digieres. Como empaque se degrada en menos de una semana, de manera que si lo tiras en la calle no daña al medio ambiente
El proyecto, presentado por las estudiantes en el Primer Concurso Nacional de Emprendedores de las universidades tecnológicas y politécnicas de Oaxaca, se ha probado como recubrimiento alimenticio en frutas, en las que retrasa el proceso de maduración.
En ese sentido, Yescas abundó que una manzana puede tener un tiempo de vida de hasta cinco días en un anaquel de exhibición, el cual puede prolongarse hasta diez con este recubrimiento sin perder pigmentación ni firmeza.
La innovación, denominada Biotecno, comienza con su proceso de degradación luego de cuatro meses, que es cuando pierde sus propiedades físicas y químicas; en ese sentido, la estudiante explicó que para ser utilizado en la industria alimentaria se le añadieron compuestos antimicrobianos para combatir hongos, levaduras y bacterias.
A su vez, la estudiante agregó que aún se trabaja en diferentes pruebas para mejorar la resistencia de este material, ello, con la finalidad de igualar las propiedades de un polímero sintético.
En México, expuso el documento, de acuerdo con información del Senado de la República, se utilizan cada día alrededor de 20 millones de bolsas de plástico, lo que representa 1.0 por ciento de la basura que se produce en el país; es decir, 107.5 mil toneladas son bolsas de plástico cada día.
Añadió que de acuerdo con el Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW, por sus siglas en inglés), una bolsa de plástico tarda en degradarse entre 400 y mil años, mientras que su tiempo promedio de uso es de 10 minutos.
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